Con más de 200 millones de dólares que se dejaron de generar en el sector industrial pesquero entre 2014 y 2015 en Baja California, Juan Morán Sánchez, presidente de la Cámara Nacional de las Industrias Pesquera y Acuícola (Canainpesca BC), exigió al gobierno federal a través del Instituto Nacional de Pesca (Inapesca) dependiente de la Sagarpa, resultados de las campañas oceanográficas del Buque de Investigación Pesquera y Oceanográfica (BIPO) para tomar decisiones –sustantivas- para el sector.
“El fenómeno de El Niño ha cobrado importancia en los tres niveles de gobierno para salvaguardar la vida humana en las regiones geográficas en donde posiblemente habrán consecuencias y eso lo aplaudimos, sin embargo, se han olvidado de los estragos que ya está generando el cambio climático, el calentamiento global y lo que sucederá para la pesca y la acuacultura ante la posible llegada de El Niño” señaló.
Morán Sánchez recordó que durante 2014 se llevaron a cabo tres campañas de investigación a bordo del BIPO y en lo que va del 2015 se realizó un crucero de capacitación y calibración de equipos científicos, con resultados relevantes sobre hidroacústica y batimetría.
El objetivo fundamental de los estudios oceanográficos y pesqueros, dijo, son para conocer el impacto que está causando el cambio climático sobre los recursos pesqueros y marinos, así como desarrollar estudios del plancton sobre larvas y fases zooplanctónicas de diversas especies como sardina, calamar, langosta y abulón, ya que se ha observado cambios en su distribución y abundancia.
Manifestó que no se ha compartido información al sector productivo, ni se han realizado mesas de trabajo para que con los hallazgos, se puedan generar estrategias que favorezcan a un sector que tradicionalmente genera para la región, más de 10 mil 500 millones de pesos anuales en divisas para el Estado.
Hoy vemos amenazados miles de empleos que pudieran salvaguardarse, al establecer una verdadera coordinación que nos permita tomar las decisiones adecuadas, y coadyuve a que la cadena de valor que representa la pesca y la acuacultura como parte del sector primario, en lugar de tender a desaparecer, se fortalezca y sea un pilar para la seguridad alimentaria del país, señaló.
Ante esta situación Morán Sánchez resaltó que el mes pasado, durante un reunión de trabajo en Ensenada, Pablo Arenas director de Inapesca se comprometió en Ensenada, a analizar la posibilidad de otorgar permisos para otras pesquerías para hacerle frente al cambio en la distribución de los organismos en el Pacífico y así, darle viabilidad al sector industrial de la pesca en la región.
El líder de la pesca y la acuacultura en Baja California destacó que en 2015, el BIPO realizará una campaña científica en el marco del 53 aniversario de la institución.
En la primera, dijo, se contemplan 6 transectos de investigación y un recorrido de navegación estimado en 4 mil 195 millas náuticas; la realización de 75 estaciones oceanográficas y alrededor de 60 actividades de pesca, así como estudios del levantamiento de la batimetría del fondo marino y su importancia en la diversidad biológica.
En la segunda etapa, explicó, la cual inicia el 15 de octubre, se determinarán 12 transectos de investigación y alrededor de 3,935 millas náuticas de navegación realizando 118 estaciones oceanográficas y de pesca, se tiene programado el final de la campaña para el día 13 de noviembre.
Informó que el personal científico y de investigación que participa en este crucero, por sus características multidisciplinarias, está conformado por expertos de diversas instituciones académicas y de investigación como son la Secretaría de Marina Armada de México, el CICESE, el CICIMAR, el CIBNOR y la Universidad Veracruzana, así como investigadores de los Estados Unidos, a través del South West Fisheries Science Center de la NOAA, y del INAPESCA.
Morán Sánchez puntualizó que hoy más que nunca, la comunicación institucional con el sector productivo es fundamental, para que en coordinación con el sector científico se pueda definir un rumbo claro que deje de condenar a la pesca y la acuacultura de Baja California a un estancamiento total.