Según las cifras publicadas hoy por el Banco de México, el flujo acumulado de remesas en los dos primeros meses del año ascendió a US$3,290.2 millones. Esto implica un crecimiento de 7.9% anual respecto al acumulado en el periodo enero-febrero del 2011.
De igual forma, durante febrero las remesas presentaron un fuerte crecimiento de 8.5% anual. Con ello, el flujo de remesas familiares enviado durante febrero resultó de US$1,788.4 millones, muy en línea con nuestro pronóstico de US$1,756 millones (consenso = US$1,756 millones; rango de estimados publicados por Bloomberg: US$1,650 millones a US$1,818.9 millones). Con cifras ajustadas por estacionalidad, las remesas registraron un avance de 1.4% mensual, después del crecimiento de 0.8% que se observó en enero.
Por su parte, la remesa mensual promedio registró una contracción de 2.3% anual en febrero. Esto implica una remesa mensual de alrededor de US$320, la cual resultó por debajo del promedio de US$325.8 observado en el 2011. Con cifras ajustadas por estacionalidad, la remesa mensual promedio presentó una variación mensual de 0.04%.
Consideramos que el flujo de remesas alcanzará un mayor dinamismo durante el primer trimestre del año. El desempeño actual del mercado laboral en EEUU sugiere que es muy probable que la tendencia del envío de remesas pudiera tornarse más positiva durante el presente año, ya que la situación laboral de los migrantes mexicanos ha observado una sustancial mejoría. Si bien la tasa de desempleo para los trabajadores hispanos en EEUU (medida que aproxima a los trabajadores migrantes mexicanos) ha presentado una ligera alza en los últimos meses, es muy probable que esta expansión se deba a un incremento en la tasa de participación, ya que el número de migrantes mexicanos que se encuentra actualmente laborando en EEUU ha presentado una fuerte expansión en los últimos dos meses.
Por otra parte, hasta ahora los últimos indicadores relacionados con la actividad económica en EEUU muestran que la economía norteamericana podría continuar con su proceso de recuperación. En particular, los indicadores relacionados tanto con el sector manufacturero como el de la construcción han presentado un mayor dinamismo en los últimos tres meses, lo cual afectaría positivamente la contratación de migrantes mexicanos durante el primer trimestre del año. Con ello, tanto el empleo de migrantes mexicanos como el flujo de remesas continuarán mostrando un fuerte dinamismo durante el primer trimestre del 2012. En México, un mayor flujo de remesas motivaría un mayor consumo de los hogares mexicanos durante el 1T12, ya que más del 17% de los hogares en México mensualmente recibe ingresos por remesas.
