Uno de los laboratorios que apuesta por la innovación y que ha decidido ampliar sus inversiones aquí es la japonesa Daiichi Sankyo.
Ya le he comentado que desde la llegada de Mikel Arriola al frente de Cofepris la regulación al sector farmacéutico ha favorecido la llegada de empresas de alto nivel, no solo en el rubro de medicinas de patente, también en el terreno de los genéricos intercambiables.
Una empresa que está en ambos mercados y que se proyecta como un jugador clave es la japonesa Daiichi Sankyo que lidera en nuestro país Toru Kirikoshi.
Daiichi es un laboratorio japonés que goza de gran reputación en el mundo y tiene su foco de negocios en medicamentos para padecimientos cardiovasculares, oncológicos y anti-infecciosos, entre otros.
Como le digo, la apuesta de Daiichi-Sankyo es convertirse en una de las grandes firmas de medicamentos innovadores a nivel global en 2015, siendo uno de sus mercados con más potencial México ya que se reconoce como el laboratorio creador de las revolucionarias estatinas, medicamentos estándar de oro alrededor del mundo para reducir el colesterol.
A nivel global Daiichi Sankyo tiene 22 plantas de manufactura y esta posicionado en el lugar 17 de la lista de los laboratorios más importantes en investigación, desarrollo e innovación a nivel mundial.
En México se presencia data de 2011 bajo el liderazgo de Kirikoshi quien ha decidido traer medicamentos de última generación y al mismo tiempo apoyar la fabricación de genéricos intercambiables siendo otro de sus activos la tradición de calidad de los productos japoneses, lo que no es un tema menor en la industria.
Entre los productos clave en esa estrategia anote al olmesartán, un medicamento que se caracteriza por su potencia, rapidez y eficacia en el control de la presión arterial y, por lo tanto, confiere a más cardioprotección ante riesgos de infarto, con el atributo adicional que por su tecnología además de proteger al corazón evita secuelas en órganos vitales como cerebro y riñones.
Otro de los productos estrella de Daiichi es la hidroclorotiazida, se trata de un diurético que se usa también para tratar la presión arterial alta y la retención de líquidos ocasionada por diversas afecciones, como la enfermedad del corazón.
Y bueno en pacientes hipertensos, la hidroclorotiazida se utiliza como tratamiento inicial, ya sea sola o asociada a otros antihipertensivos, ya que actúa inhibiendo la capacidad del riñón para retener agua, haciendo que aumente la cantidad de orina, lo que reduce gradualmente el volumen de la sangre, que retorna al corazón normalizando el gasto cardiaco.
En fin, ante la alta incidencia de infartos entre la población mexicana la aportación de Daiichi será importante no solo para el negocio farmacéutico sino para su incorporación al cuadro básico del sector salud.