La entidad del gobierno enfocada al crédito al consumo proyecta duplicar su cartera.
Ya le he comentado que en los últimos años una entidad del sector público que se maneja con los niveles de eficiencia de un banco es el Infonacot.
La entidad que tiene como mandamás a César Alberto Martínez Baranda presentará este mes su Plan Estratégico para el sexenio en un evento donde seguramente estará el presidente Enrique Peña Nieto y el secretario del Trabajo, Alfonso Navarrete Prida.
Luego que la parte social ocupa un lugar relevante en la agenda presidencial le puedo decir que en esta administración el Infonacot tendrá un fuerte impulso, ya que el crédito accesible y con buenas tasas sin duda impactará en los niveles de las familias, en especial de la clase trabajadora.
Añada que las recientes reformas a la Ley Federal del Trabajo obligan a las empresas a afiliarse al Infonacot, antes era algo voluntario, lo que eleva el mercado potencial para un instituto que tiene una cartera de 9 mil 700 millones de pesos.
La expectativa del Infonacot es que en un lapso de solo 18 meses esa cartera pueda duplicarse, no solo por la demanda de crédito de los nuevos afiliados, también por el lanzamiento de nuevos productos en los que ya trabaja el equipo de Martínez Baranda, un banquero que ocupó puestos estratégicos en Interacciones.
El año pasado el Infonacot canalizó 1.5 millones de créditos a partir del uso de tarjetas con el respaldo de MasterCard que implicaron de paso un crecimiento sin precedente en los negocios para hacer efectivos esos créditos.
Quizá recuerde que en el pasado esa entidad tenia que realizar un esfuerzo adicional para registrar comercios y servicios que pudieran recibir sus créditos, ahora se tiene un panorama muy distinto.
Pero sin duda la reforma legislativa que le comento facilitará que para millones de trabajadores sea más fácil acceder a los préstamos que ofrece el Infonacot, vía las áreas de recursos humanos, en vez de pasar por el filtro de los bancos comerciales si pretendieran obtener una tarjeta de crédito.
Incluso en términos de costos se trata de una oferta muy competitiva ya que las tasas que cobra el Infonacot oscilan de 6 a 22 por ciento, cuando las tarjetas de crédito clásicas, que son las que se ofrecen de entrada los bancos, presentan tasas arriba de 35 por ciento.
Y bueno, de las empresas que dan créditos via nómina la diferencia es mucho más notoria.
El Infonacot va tras un mercado potencial de al menos 15 millones de trabajadores que lo podrían convertir en uno de los grandes jugadores en el crédito al consumo que sigue dominado por la banca.