No hay duda que el Presidente Enrique Peña Nieto seguirá apostando al Pacto por México, pues su estrategia es lograr, mediante los consensos con los principales partidos políticos, empujar las reformas que le urgen al país, anote la energética, la fiscal y la hacendaria.
En su Primer Informe de Gobierno que rindió a la Nación, si usted está de acuerdo no se habla de resultados espectaculares, es tiempo prematuro, se habla más bien de seguir la línea de la construcción de acuerdos con la clase política y fortalecer los proyectos que anunció para diferentes sectores.
Sabe que son los propios líderes nacionales y sus legisladores los que pueden concretar las reformas que se necesitan para alcanzar el desarrollo que México necesita. Vaya, es el salto que nos falta para colocar nuestra economía con un verdadero crecimiento sostenido.
En su gobierno está más que claro que se debe trabajar con las fuerzas políticas pues el atraso que se vive en el país, en gran parte es por la necedad de los gobiernos por no querer construir, políticamente y querer ser autosuficientes. Ese fue uno de los errores del anterior Presidente Felipe Calderón que mantenía una confrontación con los perredistas.
Hoy la clase política ve bien en Peña Nieto que en todo momento comparta los créditos de los logros con cada uno de los partidos políticos, de los propios legisladores y de quienes se involucran en esta llamada transformación de México.
Entonces, la convocatoria en la Residencia Oficial de Los Pinos llevó la presencia de los líderes Gustavo Madero, Jesús Zambrano, César Camacho, de los Presidentes del Senado, el priista Raúl Cervantes y en San Lázaro, el panista, Ricardo Anaya, así como los coordinadores Emilio Gamboa, Manlio Fabio Beltrones, Jorge Preciado, Luis Alberto Villarreal, Miguel Barbosa, Silvano Aureoles, Jorge Emilio González y Arturo Escobar.
Naturalmente de los gobernadores y el propio jefe del gobierno del Distrito Federal, Miguel Angel Mancera; el gabinete y el empresariado, entre otros.
Para nadie es secreto la importancia de esos consensos con las fuerzas políticas, dentro del Pacto por México, hay en la lista varias reformas aprobadas: La Educativa, por ejemplo, que se proyecta revolucionar la calidad de la enseñanza a los millones de estudiantes, y de paso alcanzar una preparación superior de los maestros.
Se aprobó la Ley de Telecomunicaciones que genera una apertura a la competencia, con la intención que se beneficie a los usuarios de los servicios de la tecnología con tarifas muy por debajo de las actuales. Actualmente el monopolio en telefonía, internet y telefonía móvil, se ofrecen además de baja calidad a costos muy pero muy altos comparados con países desarrollados.
No pierda de vista las millonarias inversiones en créditos que anunció el Presidente para reactivar e impulsar la Micro, Pequeña y Mediana empresa, las famosas Pymes, que son las principales generadoras de empleos, anote por ejemplo que 7 de cada diez ahí se registran.
Otros proyectos están situados en detonar el sector ferroviario, los titulares de SCT y Economía, Gerardo Ruiz Esparza y Idelfonso Guajardo han recorrido varios países, entre ellos China, donde promueven las inversiones y le cuento que ya hay interesados.
Sume que el proyecto son las rutas del tren de pasajeros con alta tecnología para México-Querétaro, México-Toluca, un suburbano en Guadalajara con conectividad a sus alrededores y la cobertura del peninsular en Yucatán, Campeche y Quintana Roo, con extensión a Chiapas. Ahí se ubica la famosa ruta Maya.
Agregue que en ese punto, la Secretaria de Turismo, Claudia Ruiz Massieu trabaja para apuntalar el sector turístico de esas zonas. El sureste representa espacios con bellezas naturales que ya promueve ante el mundo. Anote como atractivo la pirámide de Chichen Itzá, una de las maravillas del mundo. No solo es playa y sol, hay ecoturismo y una riqueza de cultura mexicana, con vestigios, gastronomía y sobre todo la calidez de su gente. Pero también mucha pobreza, analfabetismo e ignorancia que se deben atender.
Peña Nieto sabe de la importancia del trabajo que han hecho los legisladores de los principales partidos políticos, que son ellos los que han permitido, mediante consensos destrabar las reformas que por años se mantenían congeladas.
Por eso aprovechó la presencia de los parlamentarios, líderes nacionales, de los gobernadores y la clase empresarial, en su Informe de Gobierno que estamos a 120 días para que este 2013 sea recordado como un año de grandes transformaciones. El mensaje fue más que claro, pues, como en las anteriores iniciativas, espera lograr que se aprueben las grandes reformas energética y la hacendaria, para entonces, juntos, gobierno y partidos, dar ese gran paso a la transformación.
