Miguel Angel Mancera pasara a la historia como el impulsor de la reforma Política para el Distrito Federal. Es una herramienta que hoy permitirá alcanzar los beneficios que le fueron negados toda la vida de existencia a esta ciudad capital.
Naturalmente que traerá múltiples beneficios para los capitalinos y el propio gobierno de lo que ahora se llama Ciudad de México. Vamos deja atrás el conocido como Distrito Federal.
De entrada, esta nueva disposición permitirá que el jefe del gobierno pueda nombrar al jefe de la Policía, pues esta facultad era exclusiva del Presidente de la República, basta recordar a Marcelo Ebrard por el Caso Tláhuac que Vicente Fox como Primer Mandatario lo cesó del cargo.
También deja sin efecto que el Presidente de la Repúblicas pueda desaforar al jefe del gobierno hoy de la Ciudad de México, pues esa facultad pasa, como en todos los estados a los Congresos locales que en generalmente la mayoría son diputados del color que gobierna.
Desaparece la Asamblea Legislativa y se convierte en un Congreso local y se suma a los beneficios de recursos presupuestales como cualquier entidad federativa.
Sigue vigente la entrega de recursos de capitalidad, es decir para este 2016 será de unos 4 mil millones de pesos, dinero que es para mitigar los servicios que utilizan diario los más de 4 millones de habitantes del Estado de México que vienen a trabajar en esta ciudad capital; así como las afectaciones a comercios y servicios prestados por las manifestaciones y movimientos de personas ajenas a esta ciudad.
Desde luego que la Ciudad de México contará con su propia Constitución y podrá tener voz y voto en las decisiones de las reformas Constitucionales que necesita de la mitad de los estados más uno en la aprobación de las leyes.
Bajo este escenario que fortalece al propio Mancera, desde luego que no se puede quejar del espaldarazo que además le dio el Presidente Enrique Peña Nieto con la promulgación de esta reforma. Las miradas de admiración fueron más que elocuentes para este político que llegó al gobierno postulado por el PRD.
Agregue el beneplácito del presidente de la Cámara de Diputados, Jesús Zambrano que, nadie olvida fue uno de los impulsores para el acuerdo del Pacto por México que la integró. Otro de los personajes de peso, fue el propio presidente del Senado, Roberto Gil que con su grupo parlamentario del PAN que coordina Fernando Herrera, lograron apuntalar el voto para aprobarla con el respaldo de los priistas que comanda Emilio Gamboa, un operador de altura en su calidad de presidente de la Comisión de Coordinación Política.
Mancera pasara la historia porque, les guste o no a sus adversarios políticos, incluyendo al dueño de Morena, Andrés Manuel López Obrador, tuvo la madurez política e inteligencia para empujar con los perredistas el acuerdo que permitiera sacar esta reforma que nadie olvida la frustración porque la mantenían como muchas otras en la congeladora de la Cámara Alta.
Si bien los capitalinos desconocían los alcances, Mancera se aventuró comprometer en su campaña proselitista lograr su aprobación. Que sería una de las prioridades para dar identidad a nuestra capital. Hoy podemos advertir que se escribe la historia de esta nueva reforma y sin duda en el futuro los libros darán cuenta de este capítulo.
Manlio Fabio Beltrones por fin descifró el crucigrama para designar candidato en Oaxaca en la persona de Alejandro Murat, un joven político que promete grandes expectativas para sacar de la pobreza y atraso a sus paisanos. Manuel Añorve, como responsable de organización echó mano de toda su habilidad para apuntalar los acuerdos.
Murat dejo atrás al senador Eviel Pérez Magaña que, dicen los que saben trae un gran capital político que puede coadyuvar al triunfo del ex director del Infonavit para recuperar ese estado en manos de la izquierda con Gabino Cué.
Los priistas confían en la capacidad de inclusión de Murat pues no hay que olvidar al empresario y ex dirigente de ese organismo, Gerardo Gutiérrez Candiani que, como quiera que sea puede aportar su granito de arena.
Falta Quintana Roo e Hidalgo. El político sonorense entrará a la etapa final para lograr las 12 candidaturas para el 2016. En Quintana Roo son dos problemas, el primero alcanzar acuerdos entre los tres finalistas: el diputado federal, José Luis Toledo “Chanito; el líder del PRI estatal, Raymundo King y el ex subsecretario de Turismo, Carlos Joaquín, el problema es que este último se reveló firmar la carta de acuerdo entre los aspirantes.
Y el otro, que Cancún está al rojo vivo, pues este polo turístico el más importante del país se ha convertido en una obsesión del Verde para imponer al joven diputado Remberto Estrada bajo un esquema de acuerdo nacional. Los priistas cuentan con Marybel Villegas que marca una desahogada ventaja en las preferencias, incluyendo contra la alianza de la oposición. ¿Obsesión o triunfo?