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Marcelo el Senador

Tiempo de lectura: 2 minutos

Por José Antonio Chávez

El ex jefe del Gobierno (hoy) de la Ciudad de México, Marcelo Ebrard será el primero en la lista de los plurinominales al Senado de la República en el 2018.

El propietario de Morena, Andrés Manuel López Obrador decidió que su regreso de París, Francia se incorpore, con toda seguridad y sin escalas, a la Cámara Alta como Senador de la República con la opción de perfilarse como mandamás de la bancada.

El carnal Marcelo, como coloquial le decían en el gobierno de López Obrador, tendrá garantizado el espacio pues basta recordar que de la votación que alcance Morena en el 2018, al menos tendrán derecho a siete senadores de los llamados plurinominales, es decir de los que llegarán becados y sin despeinarse porque no hay necesidad de hacer campaña.

Marcelo es el hombre leal de López Obrador, fue el quien se hizo a un lado para dejarle el espacio en la pasada elección para que se convirtiera en el candidato del PRD para pelear con Enrique Peña Nieto del PRI. Eso no lo olvida el dueño de Morena.

Hoy le pagará la factura para que Ebrard pueda gozar de seis años sin preocupación alguna cuando llegue a México, pues los de enfrente le tienen un expediente muy gordo para acusarlo a él y a Mario Delgado, entre otros de las fallas en la construcción de la Línea 12 del Metro.

En consecuencia, Ebrard se agrega a la lista de los inminentes próximos senadores, Delfina Gómez por Edomex, Rocío Nahlé por Veracruz, Armando Guadiana por Coahuila y para la Cámara de Diputados, anote aCésar Cravioto, como el más viable para coordinar la bancada.

El próximo 3 de septiembre López Obrador cerrará las puertas del partido y no registrará a nadie más, incluyendo partidos políticos que llamó para aliarse.

Son las reglas que impuso porque quiere, primero en esa fecha en el acto público levantar la mano a los adheridos, y, segundo, porque a partir de esa fecha solo se quiere dedicar a hacer la reingeniería electoral para acomodar sus fichas y arrancar la campaña.

 

En el PAN Y PRD, de Ricardo Anaya y Alejandra Barrales, ayer corrió como reguero de pólvora que no habrá impedimento para designar candidatos externos, o incluso provenientes de otros partidos, a los cargos de elección popular, entre ellos la CDMX.
Que el traje casi está hecho a la medida para Ricardo Monreal en una alternativa si no es el elegido de Morena. Es decir la puerta se abre para él aunque hasta hoy no creo que le interese al zacatecano, pues dicen los que saben que al señor López también la está pensando para donde mover este miércoles su dedito en los resultados de las encuestas, Sheinbaum o Monreal.