· La metodología de cálculo y ajuste de las Tarifas Finales del Suministro Básico no impacta a los sectores doméstico y agrícola, que representan el 90 por ciento de los consumidores.
· En el 10 por ciento restante, al cual aplica la nueva metodología (industria, servicios y comercio) no ha habido alza generalizada en las tarifas e incluso se observan reducciones en la facturación en algunos usuarios.
· Si bien la aplicación de la metodología no ha tenido impacto generalizado en los sectores industrial, de servicios y comercial, se han identificado casos atípicos en facturación en la Península de Baja California, mismos que están siendo atendidos.
· La CRE ha mantenido un diálogo constante con organismos empresariales con el fin de obtener retroalimentación e identificar otros casos puntuales por parte de algunos usuarios.
En noviembre del año pasado, el Órgano de Gobierno de la CRE aprobó la metodología de cálculo y ajuste de las Tarifas Finales del Suministro Básico que utiliza a partir de diciembre de 2017 para determinar el valor de las tarifas finales que aplicarán a todas las personas físicas o morales que son atendidas por CFE Suministro Básico, lo cual representa un paso fundamental en la transformación del sector eléctrico de nuestro país.
La nueva metodología de cálculo y ajuste de las Tarifas Finales del Suministro Básico se basa en tres principios generales:
· La recuperación de todos los costos eficientes de las empresas de CFE (generación, transmisión, distribución y suministro básico).
· El reflejo de las variaciones temporales del costo del servicio eléctrico dependiendo del momento del año, con el fin de obtener un mercado y consumo eficientes.
· El desarrollo de un mercado abierto.
Es importante señalar que la Comisión Reguladora de Energía (CRE), la Secretaría de Energía (SENER) y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) han trabajado durante los últimos tres años en el desarrollo de esta metodología, así como CFE Suministrador de Servicios Básicos, debido a que estas instituciones juegan un papel importante, ya sea en la definición o en la aplicación de la nueva metodología tarifaria.
Es destacable que esta metodología no impacta a los sectores doméstico y agrícola, que representan el 90 por ciento de los consumidores. En el 10 por ciento restante, al cual aplica la nueva metodología, conformado por industria, servicios y comercio, no ha habido alza generalizada en las tarifas e incluso ha habido reducciones en la facturación de algunos de ellos.
Si bien la aplicación de la metodología no ha tenido impacto generalizado en los sectores industrial, de servicios y comercial, se han identificado casos atípicos en facturación en la Península de Baja California, mismos que ya están siendo atendidos en coordinación con la CFE.
La Comisión ha mantenido un diálogo constante con las organizaciones empresariales con el fin de analizar algunos casos aislados en otras regiones y ha compartido con la mayor transparencia los cálculos que se llevan a cabo en el proceso de implementación de las tarifas. Este diálogo continuará en los siguientes días.
Finalmente, se está trabajando en mecanismos complementarios que permitan mitigar en su caso, variaciones significativas en las tarifas hacia adelante.