Rogelio Varela
¿Sabían ustedes que hay un Consejo de Publicidad Exterior de la Ciudad de México que debería regular al sector y garantizar una competencia pareja? No es así.
El ente presidido por la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi) de Felipe de Jesús Gutiérrez, quien por cierto nunca asiste a las sesiones de Consejo, ha resultado inoperante, y dicho por empresarios del ramo de la publicidad exterior, solo ha servido para tratar de legitimar actos de autoridad contra la industria, los cuales han fracasado pues normalmente excede sus facultades.
Existen problemas en la integración de dicho organismo, lo cual ratifica lo dicho arriba: las autoridades que deberían de asistir a las sesiones nunca lo hacen, envían en su nombre a funcionarios que desconocen el tema, la industria no está representada en su totalidad, ni todos los medios exteriores, ni todas las empresas de la industria publicitaria, lo que complica el panorama.
Añada que existen consejeros con voto que no forman parte de ninguna asociación u organización dedicada a la publicidad exterior, lo cual es un requisito en el Reglamento de Publicidad, como es el caso de SHOWCASE de Isabel Miranda de Wallace, que supuestamente entró por un amparo.
Otro tema es la duplicidad de representación por parte de varias empresas que están en dos organizaciones distintas, pero con la misma razón social, como las tres empresas que quedan en la Asociación Mexicana de Publicidad Exterior (AMPE), que preside Raúl Roldán (Murales, S.A., Comunicación Técnica Integrada CTI y Raúl Roldan Barrios), que a su vez están representadas e inscritas en CANACINTRA que preside Enrique Guillén.
De igual forma, la consejera invitada permanente, Anuncios Técnicos Moctezuma, de la familia Rodríguez, también está afiliada a CANACINTRA. Y por último, sumemos también la polémica de otro consejero, Ricardo Escoto, de la Asociación de Publicistas en Exterior (APEX), quien solo representa a sus empresas.
El caso es que hay personas que ocupan doble silla, y más pronto que tarde deberán decidir si están con melón ó con sandía. Mientras tanto, veremos qué sucede en septiembre cuando se nombren nuevos consejeros.
La ruta del dinero
De manteles largos TV Azteca celebra hoy sus primeros 25 años de cambiar la televisión abierta en México. La televisora de Ricardo Salinas Pliego en 1993 apostó por la competencia en un mercado donde no existían alternativas, y su llegada ha marcado un antes y un después en la historia de la televisión de habla hispana al introducir nuevos formatos, talento, ideas, espacios plurales y de opinión para audiencias cada vez más demandantes. La televisora del Ajusco, hoy bajo la batuta de Benjamín Salinas Sada, está más fuerte que nunca con contenidos que se exportan y que en sus números es muy competitiva, amén de ser una empresa socialmente responsable. De lo nuevo en el cambio que ha impulsado Salinas Sada anote la consolidación de cuatro canales nacionales de televisión –Azteca Uno, Azteca 7, a+ y adn40–, una creciente plataforma digital y la distribución más allá de las fronteras con Azteca Internacional.