Por Rogelio Varela
Entre los intermediarios financieros no bancarios las sofomes han mantenido en los últimos años crecimientos de doble dígito al atender nichos en el segmento de micro y pequeñas empresas que no son atractivos para los bancos.
Esta semana se llevará a cabo en la capital del país la XII Convención de la Asociación Mexicana de Sociedades Financieras de Objeto Múltiple (Asofom), un foro que servirá para hacer un balance sexenal de lo que algunos han dado en llamar la banca paralela.
Las sofomes ya tiene un cartera de crédito que rebasa los 800 mil millones de pesos, y a decir del presidente de la Asofom, Adolfo González Olhovich, en la próxima administración podrían tener un despegue a partir del enfoque social que se buscará imprimir a las políticas públicas, algo que no será ajeno al mercado financiero.
Otro aspecto no menor es que han logrado reconocimiento de las autoridades financieras, y prueba de ello es que el foro que le comento será inaugurado por el secretario de Hacienda, José Antonio González Añaya quien dicho sea de paso, en su trayectoria en el sector financiero se le debe la regulación que dio origen a las sofomes.
Anote además la participación del director de la Bolsa Mexicana de Valores, José Oriol Bosch, y la de la banca de desarrollo representada por Nafin de Jacques Rogozinski y de la Financiera Nacional de Desarrollo (FND) que comanda Enrique Martínez y Morales.
Actualmente existen en el mercado financiero más de mil 600 sofomes, aunque en la Asofom están insicritas poco más de 170 intermediarios que tienen una cartera por más de 320 mil millones de pesos que han financiado exclusivamente actividades productivas, es decir han dirigido su crédito a negocios.
Se trata de un actividad muy diversificada ya que hay sofomes que tienen como foco el crédito al consumo, hipotecas, créditos agropecuarios, financiamiento de vehículos y para préstamos personales, entre otras actividades lo que refleja las enormes necesidades de crédito que tienen familias y empresas.
Aunque muchos siguen viendo a la sofomes como un nicho vulnerable dados los vaivenes de la economía, lo cierto es que a diferencia de la banca comercial no capta directamente del gran público ahorrador, por lo que es claro que sus socios deben cuidar su capital al momento de prestar.
Como sea, la expectativa de González Olhovich es que el mercado de las sofomes se depurará y deberá aprovechar el nuevo empuje que se espera para la banca de desarrollo en el gobierno en puerta.
La ruta del dinero
Con alrededor de 250 mil socios conductores y 8 millones de usuarios, uno de los principales compromisos de Uber, que encabeza Federico Ranero, es contribuir al tema de la seguridad y desde hace semanas aplica la tecnología de Aprendizaje Automático (Machine Learning). La tecnología implementada a través de algoritmos automatizados permite a la plataforma bloquear determinados viajes que representen un posible riesgo para el usuario ó para el socio conductor de la aplicación.
Esta nueva tecnología se une a otras herramientas como la verificación de identidad a través de Facebook para nuevos usuarios que pagan con efectivo.