Por Citibanamex
La forma más que el contenido de una inesperada iniciativa del gobierno entrante en materia de regulación bancaria impacta a mercados. La iniciativa sobre regulación bancaria presentada por el Senador Monreal el día de ayer se refiere a un cambio regulatorio que buscaría bajar las comisiones bancarias. Su importancia e impacto no radican en el contenido, es decir que no tienen que ver con si la propuesta de regulación financiera es justa o no. Una modificación a la regulación financiera, en sí misma, tendría un impacto sectorial bancario (y no sistémico) y diluido si se hubiera insertado en un proceso formal regulatorio usual. Lo relevante es por la forma en que se procesó, por sus similitudes con el proceso de cancelación del Aeropuerto en Texcoco, y porque quien lo presenta es el Presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado, y considerado cercano al Presidente Electo. Por consiguiente, los mercados no parecen haberla considerado una iniciativa aislada.
En un solo día, los mercados financieros del país tuvieron resultados notoriamente negativos, atribuibles a una iniciativa de ley, lo cual tiene pocos precedentes históricos. Como lo mostramos en nuestro reporte de ayer, los mercados financieros mexicanos sufrieron mucho más que los globales debido a la presentación de la citada iniciativa de ley. La pérdida de riqueza en el valor de las empresas que cotizan en bolsa fue extraordinaria, particularmente en su valuación en dólares. Al controlar por lo ocurrido en el promedio de otros mercados financieros emergentes, más de 90% es atribuible al factor local. El hecho de que el evento ocurrió en un solo día -a diferencia del tema del NAICM-, permite con mayor facilidad llegar a esta conclusión. Destaca que no sólo los valores ligados a los bancos se vieron afectados, sino que trascendió al conjunto de los mercados mexicanos. La depreciación cambiaria y el nuevo aumento de tasas de interés tienen repercusiones desfavorables sobre las decisiones de consumo e inversión.
La iniciativa, junto con otras posturas del gobierno electo, genera preocupación respecto al potencial inicio de un proceso de desinstitucionalización en el país. La forma intempestiva en que se anunció la iniciativa reitera la disposición del nuevo gobierno a adoptar un proceso de toma de decisiones al margen del estipulado institucionalmente, y más en línea con el que usaron para cancelar el proyecto del NAICM. Una iniciativa como ésta normalmente hubiese seguido un proceso de presentación y retroalimentación con los reguladores (Banco de México, CNBV), lo que oportunamente habría enviado el mensaje a los mercados de que la medida estaría en proceso y así no hubiera habido sorpresas. No obstante, al igual que con la consulta popular que derivó en la cancelación del proyecto NAICM en Texcoco, la decisión de ejecutar un cambio de política se presentó haciendo caso omiso de las reglas institucionales previstas para ello. Allá se ignoraron las garantías constitucionales de validez para un referéndum y los contratos en curso, acá se ignoró a los reguladores. Y es justamente la decisión de ignorar las reglas institucionales lo que genera nerviosismo y desconfianza más allá del sector bancario. Además, el documento de la iniciativa muestra descuido en la parte técnica, sus fuentes son básicamente noticias periodísticas, no hay estudios objetivos, al igual que en el caso del NAICM (lo cual desarrollamos en un reporte anterior) lo cual muestra precipitación.
Se confirma el deterioro en las perspectivas macroeconómicas que recientemente publicamos. Al final de la desfavorable jornada financiera de ayer, Monreal anunció que su propuesta no se turnará a comisiones sino hasta el próximo periodo ordinario de sesiones del Congreso (febrero 2019). Obviamente, los mercados se han vuelto sensibles a este tipo de decisiones tanto por su importancia específica (aquí se trata de un sector relevante para el conjunto de la economía), como por las señales que envía sobre futuras decisiones relevantes para el país. Esto robustece nuestro nuevo escenario macroeconómico delineado en la nota del 6 de noviembre (Citibanamex, Nuestro escenario macro: el polvo se asienta… en un nivel más alto de primas de riesgo).