Ricardo Monreal tiene muy claro el terreno que pisa y los ministros de la Suprema Corte de la Nación parece que lo saben.
El recurso de reclamación que el Senado, que preside Martí Batres, interpuso con su directora jurídica, Zuleyma Huidobro para desconocer la resolución que emitió su par de la Corte Alberto Pérez Dayán, les metió una doble presión al Poder Judicial que incluso los puede llevar a que sesionen de forma extraordinaria para que resuelvan en el Pleno antes del 31 de diciembre.
Anote que el próximo sábado, el Presidente Andrés Manuel López Obrador, enviará el Presupuesto del 2019 a San Lázaro y los diputados, de Mario Delgado tienen los siguientes 15 días para acomodar los dineros de ingresos y egresos que consideren, y no crea que van a tener el mínimo problema para aprobar lo que les venga en gana, porque cuentan con la mayoría simple (250 + 1).
Por eso la presión es mayúscula a los ministros para que resuelvan el recurso de reclamación antes de fin de diciembre, a pesar qué, por ley cierran la cortina el próximo viernes.
Dicen los que saben que Monreal con ese enfrentamiento los tiene, a los ministros, contra la pared pues el desgaste que sufren por lo que ellos llaman “la campaña de desprestigio”, les ha pegado por los altos salarios que los acusan que ganan. Eso sin hablar del nepotismo que fueron exhibidos jueces, magistrados y más, por ejemplo los casos de Campeche y Durango entre otros.
El recurso de reclamación integra que se resuelva por otro ministro al que otorgó la suspensión, vaya que dejen fuera al responsable Pérez Payán, toda vez que incluso lo acusan que sin facultades suspendió la aplicación de la Ley de Remuneraciones considerando su interés personal y afectando el orden público, el interés social, la economía nacional y la división de poderes.
Entre los argumentos, le urgen al ministro presidente, Luis María Aguilar resolver con extrema urgencia para evitar daños irreparables a la economía nacional, considerando que esta suspensión que otorgó Pérez Payán interfiere en el proceso presupuestario del 2019 que, como se sabe, debe llevarse del 15 al 31 de diciembre.
En el Poder Judicial alegan que no es cierto que ganen 600 mil pesos mensuales como dijo el Presidente López Obrador. Desde luego que no se refirió a ellos, los de abajo, sino a los ministros que sin duda cuatro de ellos ganan más de 500 mil pesos, eso lo saben y no lo pueden desmentir pues en bruto al año registran 6 millones 938 mil 234 pesos.
Los números son muy desproporcionados al grueso de empleados del mismo Poder Judicial que ganan entre 20 y 22 mil pesos con una preparación extraordinaria y muy pero muy difícil que puedan pensar alcanzar mejores plazas con mejores salarios.
Agregue que ahora el Sindicato mando un oficio de prevención a sus agremiados para que tramiten sus constancias de percepciones y puestos desempeñados, para estar preparados y hacer valer los medios de defensa, es decir que no les afecte si disminuyen el presupuesto y eviten que les quiten sus bonos cada tres meses, sus salarios también están castigados.
Esos cuatro ministros que por ley perciben esas cantidades porque asumieron en el o antes del 2009 del tercer transitorio de la reforma que fijo el tope del salario de su presidente. Por eso López Obrador les restregó, en la conferencia mañanera que tiene la información. Ya saldrán los nombres y los montos totales.
Los magistrados y jueces federales levantaron la voz en sus sedes del país, en la Ciudad de México en el Palacio de Justicia de San Lázaro incluso soltaron la nómina de lo que ellos ganan. No superan, algunos ministros 270 mil y los de abajo 140 mil.
Dicen los que saben que los ministros están a un paso de entrar al diálogo con los mandamás Ricardo Monreal y Mario Delgado. Tal vez sea para lograr acuerdos y se destrabe el proceso de cómo quedarán los dineros, es decir el presupuesto del Poder Judicial y, obviamente sus salarios.
En el Poder Judicial saben que pueden llevarse el caso hasta el 2019 con los mismos salarios, pero corren el riesgo que en ese año se reforme la Constitución para dar paso a bajarles a como de lugar los salarios menos que el Presidente de 108 mil mensuales. Su resistencia los dejaría muy mal parados ante la sociedad.
Plan nacional de salud en Mérida y la nomina centralizada
El viernes el Presidente Andrés Manuel López Obrador presentara en la blanca Mérida el Plan Nacional de Salud. Naturalmente como anfitrión el gobernador Mauricio Vila que por cierto sigue recibiendo elogios por mantener su entidad como la más segura del país.
No pierda de vista al Presidente para conocer si le da entrada a la propuesta que le llevo el gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat de centralizar, como fue con los Maestros la nómina del sector salud, pues se siguen duplicando y les da puerta a los que mandan en se sector del sindicalismo a pedir más y más dinero a los gobiernos todos los años. Por eso centralizar la nómina permitiría ahorros extraordinarios. Mérida puede ser el lanzamiento.
El viernes hay tres gobernadoras
El viernes rendirá protesta como gobernadora Constitucional, Martha Erika Alonso, se suma a Claudia Sheibaum en la CDMX y la actual de Sonora, Claudia Pavlovich. El más contento, sin duda es su esposo el senador Rafael Moreno Valle pues para nadie es secreto que el triunfo en el Tribunal Federal Electoral fue de panzazo: 4-3.