Por José Antonio Chávez
El Presidente Andrés Manuel López Obrador aprovechó el 102 aniversario de la Constitución que congregó, allá en Querétaro la crema y nata de la política, de todos colores, para advertir la necesidad de modificarla para castigar con todo el peso de la ley los delitos electorales y de corrupción, trátese de quien se trate.
Desde luego que López Obrador no podía aceptar que México este en el lugar 135 de los países más corruptos del mundo, que eso es una vergüenza que no puede seguir.
Y tampoco que los delitos electorales no se les dé la importancia cuando para ganar elecciones se compran votos, se dan dádivas y dinero y que eso tampoco se puede seguir tolerando.
Que hoy se tiene que establecer una auténtica democracia y acabar con los fraudes electorales, que ya nunca más se compren votos y nuca más se utilice el presupuesto -dinero del pueblo- para favorecer a ningún partido y ningún candidato.
Su mensaje levantó ámpula, estaban en el Teatro de la República gobernadores y senadores priistas, panistas y hasta perredistas.
Sonaba como un reclamo que el pueblo le pidiera transmitir a López Obrador, vaya un discurso como de campaña.
La Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero sintetizaba las bondades que se deben alcanzar, vaya que saben perfectamente que hacer la ley no es lo mismo que aplicarla, y que la Constitución no solo s el marco que encuadra su desempeño como gobierno, sino una guía para atender las demandas y aspiraciones del pueblo mexicano.
En esa entidad el gran anfitrión fue el gobernador Francisco Domínguez, el mismo que impulsó desde el Senado con el entonces presidente Pablo Escudero en la pasada Legislatura, recuperar este recinto, un inmueble que estaba listo para edificar espacios departamentales y comerciales sin importar destruir la historia.
Fue el gober y Escudero, el propio ex gober también y senador Enrique Burgos y otros más los que convencieron a los propietarios para lograr ese rescate del Teatro de la República con dinero de la Cámara Alta. El costo ni lo pida, salió barato si se compara lo histórico que representa.
Desde luego que ser anfitrión llevó al gobernador Francisco “pancho” Domínguez abrir el discurso y en consecuencia ser el único que critico la polarización pues para nadie es secreto que en esta administración se siente por mucho el divisionismo.
Que hoy a 102 años, como integrantes del estado mexicanos y del pacto federal, hay la obligación de refrendar su compromiso con la democracia, con el federalismo y con la representación popular, sin faltar a enfrentar juntos los logros y los rezago que agobian a millones de mexicanos.
Para cerrar, simplemente refrendó que la democracia debe conducirlos a la unidad y nunca a la división, que quiso decir, bueno basta preguntarle a los morenos.
Bueno, no pierda de vista los compromisos de López Obrador, pues sabe a ciencia cierta que puede sacar los compromisos si tomamos en cuenta que tal vez el Congreso de la Unión y hasta la Corte estén más que cargados a este nuevo gobierno.
Por ejemplo, en el Senado, por lógica, operan con la tarea desde Palacio Nacional Martí Batres como presidente y Ricardo Monreal como mandamás de la mayoría de legisladores.
Que decir de la Cámara de Diputados que lidera en la Mesa directiva el hombre de mil peleas, Porfirio Muños Ledo y como coordinador Mario Delgado de la súper bancada morenista que integra en su movimiento resentidos de todos colores, entre ellos priistas y perredistas.
Tienen la mayoría del Congreso y tienen la lana lista para lo que se ofrezca, eso si no sea usted mal pensado, no es para comprar conciencias o votos, no. Es por si hay gastos extraordinarios.
Que decir de la presencia del Ministro presidente, Arturo Zaldívar Lelo de Larrea del Poder Judicial que, dicen los que saben se identifica al movimiento del Primer Mandatario.
Ahora basta esperar los refuerzos que llegarán próximamente con la terna que mando López Obrador al Senado para designar otro miembro más de la Suprema Corte y que acusan están totalmente ligados a los morenistas.
Naturalmente que mal haría el señor López si no aprovechará lo que los partidos cuando estuvieron en el poder hacían, es decir poner, colocar o designar a sus allegados en cargos claves, como la Corte y las dependencias “autónomas” de Fiscalía General, Tribunal Federal y más.
Para nadie es secreto que en las elecciones por regla los gobiernos de los tres ordenes destinaban o destinan recursos y la infraestructura gubernamental para impulsar y empujar a sus candidatos, en los últimos años menos cínicos, pero al fin desvíos de recursos.
Tal vez por eso sonaba como regaño, que no era posible que no se castigara, por ley como delito grave el fraude electoral y la corrupción, una total vergüenza.
Otra de Noroña contra alcaldesa de Reynosa
Los panistas de Marko Cortés se le fueron a la yugular al diputado Gerardo Fernández Noroña porque, acusaron de nueva cuenta que insultó ahora a la presidenta municipal de Reynosa, en Tamaulipas, Maki Ortiz al llamarla la “alcaldesa pedorra” es terrible. Que tiene destrozada la ciudad y que da tristeza.
Adriana Dávila, exsenadora y ahora inquilina de la bancada en San Lázaro de Juan Carlos Romero Hicks, calificó a Noroña como un personaje rencoroso, imprudente, rabioso y fanfarrón. Y le exigieron una disculpa pública. Para rematar simplemente dijo que espera ver si se escuchan en la máxima tribuna de San Lázaro a sus compañeras diputadas, de todos los partidos pronunciarse sobre el particular y demostrar que la defensa de género va más allá de plantear nuevos conceptos como la sororidad.
Televisa líder en audiencia en Súper Bowl
A pesar del bajo rating que presentó a nivel mundial el Súper Bowl, Televisa logró liderar la audiencia de ese encuentro Carneros de Los Angeles-Patriotas de Nueva Inglaterra, al registrar 8 millones 149 mil personas, en base a los números que presento IBOPE México.
Las cifras que ofreció es que la televisora de Emilio Azcárraga con el canal 5, superó a TV Azteca por 3.95%.
Que decir en el futbol mexicano que en su regreso a la televisión abierta de las Chivas de Guadalajara, en su encuentro con Veracruz, alcanzaron, de acuerdo con la misma firma IBOPE, 4 millones 619 mil personas, con ello se establece que superó a su competencia del Ajusco con 34.74%.