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Economía de México podría crecer 1.7%: Monex

Tiempo de lectura: 4 minutos

– El año comenzó mejor a lo esperado por la ocurrencia de eventos temporales.

– Esto a pesar del menor dinamismo económico del 4T-18, que condujo a una
constante disminución en los pronósticos de crecimiento de la economía mundial para 2019 y 2020.

– ParaMéxico mantenemos nuestro estimado de crecimiento en 1.7% para 2019. Adicionalmente, esperamos una inflación de 3.7%, un tipo de cambio en $19.50 y la tasa de referencia en 8.0% al cierre del año.

– Para nuestro mercado accionario estimamos niveles de 48,500pts. para finales del 2018. Para las empresas
que conforman el principal indicador estimamos un crecimiento en Ventas y Ebitda del 2.5% y 6.6% respectivamente.

– Las empresas que consideramos con mayor potencial de rendimiento para el próximo año son: Mexchem, Alfa, Livepool, Alpek, Mega, Ac, Amx, Pinfra, Gfnorte y Gruma.

2019: Persisten riesgos
En el panorama mundial persisten riesgos que ya empiezan a tener
implicaciones en el desarrollo económico. Las tensiones
comerciales entre EE.UU. y otros países, principalmente China, continúan siendo una fuente de incertidumbre, pues aún se desconoce la magnitud de las distorsiones que generarán las
medidas proteccionistas sobre los patrones de comercio global a
largo plazo. Esto ha provocado una contracción en el volumen de
comercio, lo que a su vez ha contribuido a la expectativa de un menor crecimiento mundial. El menor dinamismo económico del 4T-18 condujo a una constante disminución en los pronósticos de crecimiento de la economía mundial para 2019 y 2020. Sin embargo, el año comenzó mejor a lo esperado por la ocurrencia de eventos
temporales.

La inflación disminuyó a principios de año, dado que se registraron menores precios internacionales en algunas materias primas. Sin embargo, recientemente esta tendencia ha empezado a revertirse debido a que: 1) la producción de granos se vio afectada por
condiciones climatológicas desfavorables; 2) los precios de los
metales industriales han mostrado un comportamiento heterogéneo,
frente al menor ritmo de expansión de la producción industrial y las tensiones comerciales; y 3) los energéticos han aumentado considerablemente en lo que va del año. El precio del petróleo se
incrementó ante los recortes en la producción de crudo acordados por los miembros de la OPEP y otros países. Sin embargo, ante el menor dinamismo económico y la acumulación de inventarios de EE.UU., los precios podrían frenar su escalada.

Bajo este contexto, los bancos centrales cambiaron su mensaje hacia uno más dovish a principios de año, anunciando estímulos monetarios que arrancarán en septiembre. Frente a ello, los
mercados registraron un comportamiento más favorable
descontando la posibilidad de que empiece un ciclo de recortes de
las tasas de referencia a finales de año.
Ante el contexto descrito, la aversión al riesgo se ha incrementado, fortaleciendo el precio de los instrumentos de refugio, como el dólar y el oro; y, por el contrario, los flujos de capitales enviados a las
economías emergentes se han reducido. Esto ha impactado desfavorablemente las divisas de estos países.

Expectativas para EE.UU.
En el 1T-19, a pesar del cierre de gobierno, la economía continuó
registrando un buen dinamismo. Sin embargo, el consumo y la inversión fija se desaceleraron, mientras que las exportaciones netas y la acumulación de inventarios contribuyeron de manera
positiva al crecimiento del PIB.

Estimamos que, el PIB de EE.UU.
crecerá 2.6%, la inflación cerrará en 1.9% y la tasa de referencia se mantendrá sin cabios.
Perspectivas para México
La economía mexicana se encuentra en la parte baja del ciclo. Sin embargo, indicadores más oportunos reflejan que el panorama se puede tornar más positivo. El PIB del 1T-19 aumentó 1.3% anual debido a la desaceleración del sector servicios y al letargo del
industrial. Sin embargo, las  manufacturas continúan recuperándose.
Mantenemos nuestro pronóstico de crecimiento del PIB para 2019 en 1.7%. Entre los factores que podrían jugar a favor de un mayor crecimiento se encuentran: el buen desempeño de la
economía norteamericana, que podría impulsar las exportaciones; la recuperación del consumo, que podría seguir beneficiándose de la expansión de los salarios reales; y la reactivación de la inversión y gasto público. Por el lado contrario, los riesgos a la baja de nuestro
escenario son: una mayor desaceleración de la economía mundial, la ocurrencia de la guerra comercial entre EE.UU. y China, y la reducción de estímulos monetarios.
Respecto a la inflación, se registró un punto de inflexión en su trayectoria debido a la mayor contribución de la subyacente y algunos productos energéticos. Los futuros descuentan que el precio de la gasolina de EE.UU. comenzará a bajar, lo que ayudaría
a reducir las presiones en los precios de algunos productos. Para el cierre de 2019, esperamos que la inflación se ubique en 3.70%.
Los riesgos para este pronóstico son: i) que se mantengan las presiones en el precio de algunos energéticos; ii) volatilidad cambiaria; iii) presiones en precios de algunos productos
agropecuarios; y, iv) el escalamiento de medidas proteccionistas que derive en tarifas adicionales a las importaciones.
Por lo anterior, esperamos que Banco de México recorte la tasa de referencia en 25pb en la reunión de diciembre, dadas las menores presiones inflacionarias, una brecha del producto negativa
y una política monetaria internacional más acomodaticia.