Por José Antonio Chávez
El Presidente Andrés Manuel López Obrador pidió a los partidos políticos rechazar el 50 por ciento de sus prerrogativas y como ejemplo debería comenzar Morena.
Desde luego que su llamado no surtió un eco positivo en los priistas de Claudia Ruiz Massieu y los panistas de Marko Cortés, porque el argumento es que les cortarían la de por si raquítica cifra que les corresponde después de la paliza que les dieron en las pasadas elecciones.
Es decir, de los más de cinco mil millones de pesos, tanto al PAN como al PRI les tocaría, con el recorte, escasos 500 millones de pesos cuando las cantidades en otros años superaban los 1200 millones.
Se sienten amenazados de sufrir un descalabro mayúsculo a sus finanzas que terminaría de obligarlos a cerrar oficinas y despedir más empleados.
Cerrar incluso programas de asistencia para jalar adeptos o atender a posibles nuevos militantes, aunado a las deudas por créditos y la quita de multas que son muy frecuentes, pues la abolladura sería más grave.
Bueno, la queja también es porque al partido del Presidente López Obrador, Morena, por su triunfo que barrió en el 2018 hasta con la cubeta, alcanzó mil 600 millones de pesos, más menos.
La repartición es conforme al número de votos en las elecciones, esos porcentajes permiten medir cuanto corresponde a cada partido y si hacemos cuentas a grandes rasgos, Morena se llevó la mayoría del Congreso y la Presidencia de México con 30 millones de votos.
Es decir les pego con todo, sobre todo al PRI que además de perder la Presidencia con Peña Nieto, también se desfondo en el Senado de 54 a 15 senadores y de 210 a 48 diputados en San Lázaro.
En cambio el partido del Presidente, difícilmente se pueden preocupar, pues si les recortan el 50 por ciento, se quedarán con unos 800 millones, una cifra que es mayor a la que mantenían antes de su triunfo, pues no alcanzaban ni los 300 millones de pesos.
El PRI y el PAN saben que no tienen otra salida de aceptar ese descuento del 50% de sus prerrogativas, porque simplemente en San Lázaro, el mandamás Mario Delgado impulsará la iniciativa que presentó, junto con Tatiana Clouthier recientemente para reformar la Constitución que les permita en el Presupuesto del 2020 disminuir ese monto a la mitad.
En el Senado de Martí Batres, el también mandamás Ricardo Monreal adelantó que empujarán de igual manera una reforma que se presentó el año pasado para recortar ese 50% a los partidos.
Y si agregamos que la senadora por Sonora, Lilly Téllez amenazó que presentara otra reforma pero para bajar esos dineros hasta en un 70 por ciento, pues el escenario partidista no está nada bien.
Con ello, puede apostar entonces que si no atienden el llamado del Presidente para regresar ese 50% por ciento por las buenas, entonces tendrán que hacerlo por ley, es decir por la reforma que entrara en vigor antes que se apruebe el Presupuesto en diciembre y si no pregúntele a Monreal y Delgado.
CAE BIEN AL PAN PROPUESTA CONGRUENTE PARA PRESIDENCIA DE DIPUTADOS
Los panistas de Juan Carlos Romero Hicks recibieron muy positiva la propuesta de analizar un buen perfil congruente para ocupar su partido la presidencia de la Cámara de Diputados y suceder al actual Porfirio Muñoz Ledo.
Tienen cuadros de sobra para ese cargo, son la segunda fuerza en San Lázaro y por ello les corresponde, aunque el líderMario Delgado está consciente y anuncio respetar, siempre y cuando se presente una buena propuesta, vaya cero bravucón o bravucona.
Sin embargo, a los panistas se les complicaría asumir el control de la presidencia, con la aparición de la vicepresidenta Dolores Padierna que comenzó a moverles el tapete con una amenaza abierta de no cederles nada y que Morena se quede los tres años con ese cargo.
Promueve para ello una reforma que si le da luz verde Mario Delgado, anote que sin problema Morena la ganará y ni el PAN y mucho menos el PRI la alcanzarían. Y entonces, ahora si en automático Padierna presidenta. Si hay atropello o no, en estos tiempos de austeridad, es lo que menos importa.
NO TE PREOCUPES ROSARIO HASTA QUE ESTES EN EL BOTE
A la ex funcionaria priista, Rosario Robles parece que le está lloviendo sobre mojado, aunque se vio envalentonada a su paso al juzgado del Reclusorio Sur a declarar y con su frase de vengo a dar la cara. La Fiscalía General de Alejandro Gertz Manero le imputa ser omisa ante un desvió superior a los cinco mil millones de pesos en sus dos dependencias que fue titular, Sedatu y Sedesol.
Dicen los que saben que los Secretarios de Estado o funcionarios de peso, que son viejos lobos de mar no firman ningún papel para evitar estar involucrados en posibles desvíos, como es el caso. Peo la omisión también es delito. Sí el Presidente no afloja puede meter a la cárcel, por las tantas acusaciones que ha hecho, al primer pez gordo de su sexenio o de plano, lo puede mover la amistad y solo puede quedar en un susto.