– Confianza del consumidor (julio): 105.1pts (cifras originales); Banorte: 107.8; consenso: 107.8 (rango de estimados: 104.2 a 108.5); anterior: 106.1pts
– La confianza subió sólo 0.1% en términos anuales, considerablemente por debajo del +18.2% del mes previo, con un impacto derivado de un efecto de base por la elección federal del año pasado
– Con cifras ajustadas por estacionalidad, la confianza cayó 1.6% m/m, con el subíndice de bienes duraderos siendo nuevamente el más afectado (-3.5%) a pesar de menores niveles de inflación y la relativa fortaleza del tipo de cambio
– Continuamos esperando que la confianza se modere, con el sentimiento político todavía influyendo el sentimiento pero también con un efecto negativo de la desaceleración económica y su efecto en la creación de empleos
De acuerdo al reporte, la confianza del consumidor cayó por quinto mes consecutivo al ubicarse en 105.1pts, menor al consenso y a nuestro estimado que coincidían en de 107.8pts. En retrospectiva, esperábamos cierto impulso al componente del poder adquisitivo ante menores niveles de inflación así como la relativa fortaleza del tipo de cambio en conjunto con una estacionalidad favorable asociada al periodo vacacional, lo que no se materializó. En cuanto al sentimiento político, el poll of polls de la página especializada Oraculus mostró que la aprobación neta pasó de 45% al cierre del mes previo a 44% al cierre del periodo de muestra del indicador. Entre los temas más relevantes del periodo estuvo la renuncia del Secretario de Hacienda, el Dr. Carlos Urzúa, discusiones sobre la posibilidad de una ‘recesión técnica’ en México y el plan de negocios de Pemex. Es relevante también que las tensiones comerciales con EE.UU. por temas migratorios disminuyeron tras el acuerdo alcanzado entre las partes en los primeros días del mes.
La tasa de crecimiento anual cayó a sólo +0.1% de +18.2% el mes previo, derivado en buena medida por un efecto de base desfavorable relacionado a la elección presidencial del año pasado. Esto es muy claro al observar el componente de expectativas del país, el cual se encuentra 10.2% debajo de lo visto en julio de 2018. Adicionalmente, las condiciones futuras de los hogares retrocedieron 1.0%. Sin embargo, los subíndices de condiciones actuales se mantienen altos, tanto para los hogares (+3.4%) como para el país (+14.6%). Finalmente y similar al mes precio, la tendencia más preocupante ha sido la del Documento destinado al público en general componente de compra de bienes duraderos (-2.8%), alcanzando su nivel más bajo desde noviembre de 2018, justo antes del anuncio del incremento al salario mínimo por parte del gobierno federal.