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Continuó debilidad de sector industrial en octubre: Banorte

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Por Banorte IXE

Debilidad industrial en octubre ante impacto del sector automotriz.

Reporte mensual de inflación (noviembre). Anticipamos un avance de 0.85% m/m de la inflación general y 0.23% de la subyacente, recordando que este mes muestra una elevada estacionalidad debido al fin de los subsidios a las tarifas eléctricas en algunos estados del país, que contribuirán 40pb al periodo. Por su parte, vemos todavía un alza adicional del gas LP, mientras que las frutas y verduras y pecuarios también registrarían presiones. El rubro subyacente aportaría 17pb, con 11pb correspondientes a servicios. Los bienes aportarían 6pb, con un beneficio derivado de las promociones de El Buen Fin, aunque menores a años previos. Con esto, la inflación anual sería de 3.02%, en línea con octubre. El componente no subyacente seguiría bajo en 1.14% y la inflación subyacente mejoraría en el margen a 3.66%.

Producción industrial (octubre). Esperamos una caída de -3.1% anual, debajo del -1.8% anterior y con lo que hilaría doce meses consecutivos de contracción. Con cifras ajustadas por estacionalidad anticipamos una caída de 1.2% m/m. El periodo probablemente estuvo impactado por efectos adversos y temporales tanto en el subsector de minería como manufacturas –específicamente, el automotriz–. Anticipamos que la construcción permaneció limitada. Nuestro pronóstico implica que la industria inició el trimestre con un camino complicado, poniendo en duda nuestro pronóstico de una contracción todo el año de -1.7% anual. En particular, estamos preocupados de la señal enviada por el IMEF manufacturero en noviembre, que no logró rebotar a pesar de la normalización en el sector automotriz

LUNES – Reporte de inflación (noviembre); Banorte: 0.85% m/m; anterior: 0.54%. Por su parte, anticipamos la subyacente en 0.23% (previo: 0.25%), mientras que la no subyacente avanzará 2.79% (previo: 1.46%). Como observamos desde la 1a quincena, la dinámica estará altamente influenciada por el fin de los subsidios a las tarifas eléctricas en algunos estados del país. En este sentido, estas contribuirán 40pb a la inflación del periodo. En cuanto a otros energéticos, esperamos una alza adicional del gas LP (+3pb). Mientras tanto, la gasolina se mantendría relativamente estable a pesar de ajustes al alza tanto en el tipo de cambio como en la referencia internacional, en un contexto de una ligera disminución al estímulo fiscal al IEPS. Pasando a agropecuarios, las frutas y verduras añadirían 15pb. Nuestro monitoreo muestra alzas relevantes en la cebolla y el tomate verde en la 2a quincena, extendiendo presiones. También esperamos un aumento en el precio del pollo y del huevo, resultando en una contribución de 8pb del rubro de pecuarios.

El rubro subyacente aportaría 17pb, con 11pb correspondientes a servicios. En particular, esperamos que la vivienda continúe avanzando a una tasa relativamente estable (+3pb), con las mayores presiones en otros servicios (+8pb). Los bienes aportarían cerca de 6pb, divididos de manera equitativa entre alimentos procesados y otros bienes. Sobre estos últimos, si observamos un beneficio derivado de las promociones de El Buen Fin, aunque menores a las de años previos, recordando que un día de las ofertas cayó en la primera quincena.

Con esto, la inflación anual resultaría en 3.02%, en línea con el mes previo. El componente no subyacente seguiría bajo en 1.14%, aunque aumentando respecto al 1.01% anterior. La inflación subyacente mejoraría en el margen a 3.66% (previo: 3.68%). En este contexto, seguimos esperando que la inflación cierre el año en 3.0%, recordando que habrá un efecto de base favorable durante la primera quincena de diciembre, ayudando a compensar por mayores presiones en los bienes agrícolas.

LUNES – Subasta de valores gubernamentales. La SHCP –vía el Banco de México como agente colocador– subastará Bonos M de 3 años (Mar’23), Udibonos de 3 años (Jun’22), así como Cetes de 1, 3 y 6 meses (ver el siguiente cuadro). Los resultados se publicarán a las 11:30am.

MARTES – Negociaciones salariales (noviembre); Banorte: 5.9% anual; anterior: 4.0%. Anticipamos que las negociaciones aumentaran secuencialmente, explicado por un cambio en la composición de los sectores en los que se llevan a cabo las negociaciones. Esperamos que las del sector privado sean mucho mayores en comparación a las de los trabajadores del ramo público. En este sentido, las negociaciones en el primero han promediado en el año 6.3%, mientras que en el segundo alcanzan solo 3.4%. Hacia delante, la atención se tornará al incremento al salario mínimo que pueda darse para 2020, con nuestra expectativa ubicándose entre 10-15%, lo cual creemos que continuará siendo el factor principal detrás de la dinámica salarial el próximo año.

MARTES – Reservas internacionales (29 noviembre); anterior: US$180,597 millones. La semana pasada, las reservas internacionales aumentaron en US$40 millones, explicado por una mayor valuación de los activos del banco central. Con ello, las reservas registraron un saldo de US$180,597 millones, con un avance de US$5,805 millones en lo que va del año.

JUEVES – Producción industrial (octubre). Banorte: -3.1% anual; anterior: -1.8%. Nuestro pronóstico implicaría doce meses consecutivos de contracción. Con cifras ajustadas anticipamos una caída de 1.2% m/m. El periodo en cuestión probablemente estuvo afectado por eventos temporales tanto en minería –en particular sobre servicios relacionados– y manufacturas –específicamente, el sector automotriz–. Desde una perspectiva de la oferta agregada, la industria permanece como el sector más débil en términos de su contribución al crecimiento del PIB.

Estimamos una caída de 3.9% anual de la minería, menor al -2.8% de agosto. De acuerdo con Pemex, la producción promedio de crudo fue de 1,681kbpd, (-4.9% anual). mientras que el gas siguió relativamente mejor (1.6%). En este sentido, el Director General, Octavio Romero, ya había anticipado que el mantenimiento programado de algunos activos impactaría la producción de petrolíferos, lo que también pudo haber afectado a los servicios relacionados a dicho sector. En términos de empleo, la creación de plazas parece estar estabilizándose en niveles por debajo de los registrados hace un año (-1.0% anual). En general, seguimos creyendo que la estabilización de la producción de petróleo podría añadir al crecimiento en 2020, sector que ha sido un persistente viento en contra para la industria durante un periodo prolongado.

Además de esto, nuestro pronóstico está basado en gran parte sobre la expectativa de una caída de 1.5% anual en las manufacturas, lo que sería el dato más débil desde junio 2013. Como ya mostró la balanza comercial y la producción de AMIA (-16.2% anual), esto se debería al sector automotriz, afectado por la huelga de GM en EE.UU. (que terminó el 25 de octubre) además del cierre programado de dos plantas de Ford y una de VW. En este sentido, las exportaciones manufactureras y las importaciones de bienes intermedios resultaron muy débiles, reflejándose también en la producción industrial en EE.UU. que hiló cuatro meses de caídas a tasa anual. Las cifras de empleo no sugieren un resultado tan débil, aunque es importante mencionar que el cierre temporal de operaciones no está asociado estrictamente con un mayor número de desempleados.

Por último, creemos que los decepcionantes resultados en la construcción continuarán, estimado en -7.2% anual. En nuestra opinión, el hecho de que la confianza empresarial del sector al mes de noviembre ya revirtió la ganancia de septiembre sugiere que prevalece la debilidad, con el componente sobre el momento adecuado para invertir también con una dinámica negativa. Los niveles de empleo parece que se están estabilizando pero continúan débiles, cayendo 2.3% anual. En general, los datos disponibles sugieren que los retos en el sector siguen siendo elevados.

En conclusión, nuestro pronóstico implica que la industria inició el trimestre con un camino complicado, poniendo en duda nuestro pronóstico de una contracción todo el año de -1.7% anual. En particular, estamos preocupados de la señal enviada por el IMEF manufacturero en noviembre, que no logró rebotar a pesar de la normalización en el sector automotriz, en un contexto en el que continúa la incertidumbre comercial a pesar de noticias de una potencial resolución en las tensiones entre EE.UU. y China y sobre la ratificación del T-MEC.

VIERNES – Encuesta de expectativas de Banxico (diciembre). Como es usual, la atención estará en la actualización de pronósticos de inflación, crecimiento, tasa de referencia y tipo de cambio. En cuanto al primero, los estimados para el cierre de 2019 se ubican en 2.95%, prácticamente en línea con nuestro pronóstico de 3.0%. Por su parte, esperamos que las expectativas de mediano y largo plazo presenten pocos cambios, manteniéndose arriba del objetivo. Sobre el crecimiento, la expectativa para 2019 se ubica en 0.0% (Banorte: -0.1%), mientras que la de 2020 en 1.07%, por debajo de nuestro 1.4%. En cuanto a la tasa de referencia, el pronóstico actual es que cierre el año en 7.25%, coincidiendo con nuestro estimado. Adicionalmente, el pronóstico para 2020 es de -75pb acumulados (Banorte: -125pb). Finalmente, el estimado de tipo de cambio para el cierre del año se espera en USD/MXN 19.48 (Banorte: 20.30). Para 2020, las expectativas de esta variable se ubican en USD/MXN 20.00, también por debajo de nuestro estimado, en 21.30.