UIF llegará a las últimas consecuencias
Santiago Nieto Castillo cumplirá en septiembre dos años como titular de la Unidad de Inteligencia Financiera, desde que fue nombrado en 2018 para hacer realidad la promesa de Andrés Manuel López Obrador de terminar con la corrupción, la que una vez el presidente identificó como “la amenaza más grande para México”.
A finales de 2019, Nieto aseguró que la actuación de la UIF ha sido marcada por los cinco grandes ejes del Gobierno del presidente López Obrador: el combate al robo de hidrocarburos; la trata y tráfico de personas; empresas factureras y fachada; el narcotráfico y la corrupción política. También resaltó las investigaciones de alto perfil que ha realizado en contra del exdirector de Pemex, Emilio Lozoya, el magistrado Isidro Avelar, ligado al Cártel Jalisco Nueva Generación y a Genaro García Luna, ex secretario de Seguridad Pública, que le permitieron bloquear 6 mil millones de pesos ese año.
En un informe de actividades rendido en marzo, Nieto Castillo aseguró, junto con el presidente, que “la fiesta se acabó” para grupos delincuenciales y que la corrupción es origen de la profunda desigualdad social y económica que afecta a México, además de la violencia e inseguridad. El líder de la UIF logró en noviembre pasado la aprobación de la llamada “Ley Nieto”, que le otorgará la facultad de ordenar el bloqueo de cuentas bancarias bajo sospecha de financiar al terrorismo o de incurrir en lavado de dinero.
Ahora, Santiago Nieto busca fortalecer a la UIF a través de su incorporación al Sistema Nacional Anticorrupción, que junto con la Secretaría de la Función Pública y la Auditoría Superior de la Federación, pretende identificar redes de corrupción política a partir de evidencia que se mantendrá en secreto. Además, busca incrementar mecanismos de cooperación, como es un organismo de inteligencia con la Sedena y la Fiscalía General de la República, para llevar sus investigaciones hasta las últimas consecuencias.
