Banorte
La semana en cifras
Banxico recortaría de nuevo la tasa en 50pb, a 4.50%
▪ Decisión de política monetaria (13 agosto). Esperamos que Banxico reduzca la tasa de referencia en 50pb a 4.50%, quinta al hilo de esta magnitud en lo que va del año. Esperamos otro voto unánime, tomando en cuenta que en las últimas minutas identificamos al menos cuatro miembros que consideraban que aún existe espacio para un mayor relajamiento. No obstante, esto estuvo matizado con comentarios individuales que sugieren un amplio debate sobre el nivel adecuado de la tasa terminal en este ciclo de bajas. Si bien podría haber cambios en el tono del comunicado, creemos que éste permanecerá dovish.
Para el crecimiento, considerando el choque a la actividad en el 2T20, el tono podría ser más acomodaticio; sin embargo, podría ser más cauteloso respecto a la trayectoria de la inflación.
▪ Producción industrial (junio). Estimamos una caída de 17.4% a/a, por arriba del -17.9% implícito en las cifras del PIB del 2T20. Con cifras ajustadas por estacionalidad, anticipamos un repunte de 17.1% m/m. En particular, creemos que la reclasificación como esencial de la fabricación de equipo de transporte, minería no petrolera y construcción, otros pasos para reabrir la economía y la relativa fortaleza de EE.UU., fueron claves para el desempeño. Esperamos que la recuperación sea generalizada, con los cuatro grandes sectores aumentando de manera secuencial, liderados por las manufacturas.
Procediendo en orden cronológico…
MARTES – Producción industrial (junio). Banorte: -17.4% a/a; anterior: -30.7%. Esta cifra estaría por arriba del -17.9% implícito en las cifras del PIB del 2T20. Cabe mencionar que existe un efecto favorable de días adicionales en la comparación anual. Sin embargo, tomando esto en cuenta con cifras ajustadas por estacionalidad, anticipamos un repunte de 17.1% m/m. En particular, creemos que la reclasificación como esencial de la fabricación de equipo de transporte, minería no petrolera y construcción, otros pasos para reabrir la economía, y la relativa fortaleza de EE.UU. fueron claves para el desempeño. En este sentido, esperamos que la recuperación sea generalizada, con los cuatro grandes sectores aumentando de manera secuencial, liderados por las manufacturas.
Por sectores, estas últimas resultarían en -19.3% a/a, mayor al -37.1% de mayo. En la comparación mensual, aumentarían 22.6%. En este sentido, el PMI manufacturero del IMEF avanzó 5.1pts a 43.1pts, con fuertes alzas en nuevos pedidos y producción. Los datos de la balanza comercial también fueron mucho más positivos, con las exportaciones manufactureras en +83.6% m/m (-13.5% a/a), con un gran impulso del rubro automotriz. El reinicio en este sector fue muy relevante, con el total en 238,946 vehículos ligeros. Si bien esto representa una contracción de 29.6% a/a, fue mucho mejor al -93.8% del mes previo. También hubo un desempeño favorable en otras exportaciones manufactureras, probablemente ayudadas por el mayor dinamismo en EE.UU., considerando que la producción industrial resultó en -11.1% a/a, 5.6%-pts arriba del dato de mayo. Por el contrario, el empleo formal siguió a la baja, con 34.1 mil empleos adicionales perdidos.
La construcción resultaría en -24.1% a/a (19.9% m/m), con apoyo tanto del sector público como privado. Dentro del primero, y a pesar de una falta de correlación en los últimos datos, la inversión física del gobierno federal subió 11.9% a/a en términos reales, hilando cuatro meses de crecimiento a doble dígito, lo cual tendría un efecto positivo en algún momento. Las menores restricciones también pudieron haber sido favorables. Sin embargo, esto último habría beneficiado más al rubro privado, evidenciado por la mejoría generalizada en varios indicadores, incluyendo la confianza empresarial y el indicador de tendencia agregada del INEGI. En este último, el rebote se concentró en obras ejecutadas. También muy relevante, el empleo se recuperó en 98.1 mil plazas, siendo uno de los dos sectores de la economía con resultados positivos.
Por último, la minería resultaría en -3.7% a/a (+4.0% m/m), también mejorando relativo a mayo. El desempeño al interior sería mixto, con el rubro petrolero todavía impactado por los recortes de la OPEP+, llevando la producción de crudo a 1,616 mbd de acuerdo con la CNH, nuevo mínimo en poco más de 40 años. Esto es equivalente a una reducción de 2.9% a/a, debajo del -0.9% del mes previo. Otro factor que probablemente impactó puede ser la suspensión temporal de pagos a proveedores por parte de Pemex, lo cual resultó en una reducción adicional de la producción. Por el contrario, las señales de la minería no petrolera fueron mejores, con las exportaciones extractivas en +9.3% a/a (+21.8% m/m), probablemente beneficiadas por la designación del sector como esencial.
MIÉRCOLES – Cambio en el número de trabajadores registrados en el IMSS (junio); anterior: -83.3 mil. Dentro del reporte del número total de afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social, la atención estará en la creación de empleos, recordando que en los últimos cuatro meses se han perdido un poco más de 1.1 millones de plazas. En este contexto, el Presidente López se ha pronunciado en varias ocasiones sobre la cifra de este mes. El 24 de julio afirmó que hasta ese momento se habían eliminado alrededor de 27 mil plazas, mientras que el 1 de agosto mencionó que la pérdida para todo el mes fue de sólo 3,430. En este sentido, creemos que la cifra final podría estar cercana a este último número. Dentro del reporte también analizaremos los datos de salarios, y también sobre el número de patrones, el cual ya había mostrado un aumento el mes previo.
JUEVES – Decisión de política monetaria de Banxico (13 de agosto): Banorte: 4.50% a/a; anterior: 5.00%. El jueves, el banco central llevará a cabo su sexta reunión de política monetaria del año. Esperamos que Banxico reduzca la tasa de referencia en 50pb a 4.50%, quinta al hilo de esta magnitud en lo que va del año. Esperamos otro voto unánime, tomando en cuenta que en las últimas minutas identificamos al menos cuatro miembros que consideraban que aún existe espacio para un mayor relajamiento. No obstante, esto estuvo matizado con comentarios individuales que sugieren un amplio debate sobre el nivel adecuado de la tasa terminal en este ciclo de bajas. Si bien podría haber cambios en el tono del comunicado, creemos que éste permanecerá dovish. Para el crecimiento, considerando el choque a la actividad en el 2T20, el tono podría ser más acomodaticio; sin embargo, podría ser más cauteloso respecto a la trayectoria de la inflación. En este contexto, el consenso de la última encuesta de Citibanamex (20 de 28 analistas, incluidos nosotros) estima -50pb, aunque seis esperan una baja de solo 25pb y dos que la mantenga en el nivel actual.
Acerca de la magnitud del ciclo, destacamos comentarios recientes de algunos miembros de la Junta de Gobierno. En nuestro podcast, Norte Económico, la subgobernadora Irene Espinosa mencionó que si bien la dinámica reciente de la inflación ha sido preocupante –en particular las mercancías–, espera que conforme se normalice la situación, las presiones disminuirán. Sin embargo, su postura parece estar sesgada a más recortes al afirmar que los precios de los servicios, que reflejan más la dinámica interna, se han moderado ante la holgura de la economía y las circunstancias de la pandemia. Por su parte, en una ponencia en el Congreso, el subgobernador Jonathan Heath afirmó que, en su opinión, el ciclo acomodaticio no ha terminado, buscando llevar la tasa a terreno expansivo en la medida que la situación lo permita. Del lado más acomodaticio, el subgobernador Gerardo Esquivel afirmó en una entrevista que puede existir espacio para más de un recorte de la tasa este año y que no descarta la posibilidad de una tasa real negativa si las condiciones lo justifican y es necesario. También dijo que verán si se puede usar dicho espacio en esta reunión, en septiembre y las decisiones que restan en el año (noviembre y diciembre).
Como ya mencionamos, creemos que los mayores cambios en el tono podrían ser en el frente de inflación, con el balance de riesgos aún caracterizado como muy incierto. Cabe mencionar que en las minutas percibimos que la mayoría veía un panorama más benigno para los precios al incluirse como un riesgo a la baja la tendencia de menor inflación a nivel global, entre otros factores. No obstante, los últimos datos han sorprendido en su mayoría al alza. Además, al cierre de julio la tasa anual se ubicó en 3.62% y de manera más importante, la subyacente se presionó a 3.85% –máximo desde abril 2019–. En este contexto, nosotros pronosticamos el cierre de año en 3.7% y 3.9%, respectivamente. Por su parte, la última encuesta del banco central mostró un nuevo aumento en el margen en la expectativa de inflación al cierre de 2020. Creemos que la dinámica de precios más reciente sugiere que los riesgos para los últimos pronósticos de Banxico (que estima un promedio de 3.5% y 3.8% anual para la general y subyacente en el tercer y cuarto trimestres, en el mismo orden) se han sesgado al alza desde la última decisión. Por lo tanto, será muy importante observar potenciales cambios en el tono y la trayectoria estimada en el próximo Informe Trimestral, a publicarse el 26 de agosto.
Sobre el crecimiento, existe amplio consenso de una fuerte debilidad, confirmado con una caída histórica del PIB del 2T20, sobresaliendo también que la contracción de la actividad en México se profundizó en mayo, a diferencia de otras economías. En la encuesta del banco central, la expectativa de crecimiento de 2020 se recortó nuevamente, con la mediana en -9.9%, prácticamente en línea con nuestro estimado de -9.8%. Por lo tanto, el balance de riesgos se mantendría “significativamente sesgado a la baja”. A su vez, probablemente considerarán la posibilidad de una desaceleración externa (en mayor medida por la segunda ola de contagios en EE.UU.) en un contexto aún muy complicado en términos de la evolución de la curva de contagios local, que no ha registrado un pico todavía.
Por último, la mayoría probablemente seguirá favoreciendo la cautela debido a los riesgos a la estabilidad financiera, sin descartar nuevos choques de volatilidad. Si bien el comportamiento de los mercados ha sido más estable, la incertidumbre permanece muy elevada. Entre los temas domésticos seguirán destacando riesgos para las finanzas públicas y la situación de Pemex. Por su parte, es muy positivo que continúen dando un seguimiento cercano a la profundidad de los mercados, así como los recientes ajustes en algunas de sus facilidades para la provisión de crédito y liquidez. En este sentido, es importante recalcar que algunas, como la de reportos corporativos, han tenido poca demanda; sin embargo, esto no significa necesariamente que no sean exitosas. Creemos que Banxico seguirá reafirmando su disposición para utilizar estas herramientas y anunciar medidas adicionales de ser necesario, con el objetivo de manejar los choques financieros y a la economía que se pudieran presentar en el futuro.
Después de esta decisión, reiteramos nuestra expectativa de un recorte adicional de 50pb en la reunión del 24 de septiembre hacia 4.00%, donde cerraría este año y terminaría el ciclo actual de relajamiento. En particular, creemos que la incertidumbre y reciente trayectoria de inflación, riesgos geopolíticos –sobre todo las elecciones del 3 de noviembre en EE.UU.– y la persistente incertidumbre por la pandemia, serán suficientes para limitar bajas adicionales a pesar de la postura extraordinariamente laxa de la mayoría de los bancos centrales en el resto del mundo.