Natixis IM
Escuchemos y después hagamos las preguntas. El mercado ha estado sufriendo durante las ventas masivas por alguna razón y finalmente lo logró ante la variante Omicron. Pero ¿Cómo deberá el mercado plantearse esto? Necesitamos responder a las siguientes preguntas con el fin de obtener una mejor comprensión de las implicaciones del mercado: ¿Qué tan contagiosa es la variante? ¿Qué tan virulenta es? ¿Y qué tan eficientes son las vacunas existentes para combatirlo? Nos llevará algún tiempo antes de obtener las respuestas a estas incertidumbres que solamente aumentan la volatilidad y la tendencia a evitar el riesgo en los mercados. La respuesta del gobierno en tanto, va a guiar e impulsar el ánimo de los mercados. Estados Unidos ha demostrado su aversión a implementar de nuevo restricciones muy severas, mientras que Europa ha sugerido varias formas de confinamientos y China todavía apunta a una estrategia de cero tolerancia. Entre más apertura y movilidad de la sociedad, menor es el daño económico. Y con la reacción repentina de imponer restricciones a los viajes en todo el mundo, no es de sorprender que las acciones del sector turismo y la industria del ocio se vean afectadas junto con los precios del petróleo. A más largo plazo, si la variante Omicron demuestra ser más grave, las preocupaciones por el mercado laboral y las interrupciones a la cadena de suministro podrían intensificarse a la vez que la disposición de la gente de retomar el trabajo presencial pudiera una vez más empezar a influir en los mercados. Hay demasiadas preguntas y hasta ahora las respuestas son limitadas. Y no debería sorprendernos que pudiéramos ver una reacción de ‘venda primero, pregunte después’ por parte de los inversionistas.