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El bombero AMLO y Tatiana la recaudadora

Tiempo de lectura: 4 minutos

Por: José Antonio Chávez

El Presidente Andrés Manuel López Obrador tuvo que salir a apagar el fuego que comenzaría a propagarse en el país por el nuevo impuesto que lanzó la Secretaría de Economía de Tatiana Clouthier.

Es una Norma que atiende interés internacional para cumplir en el Medio Ambiente que, según la Secretaría de Economía se debe atender y el costo sería de mil pesos para todos los autos menores a cuatro años.

Es decir, todos los vehículos comprados antes del 2018 estarían pagando esos mil pesos en octubre muy aparte de las tradicionales verificaciones que se hacen dos veces al año.

Para que se dé una idea del monto que recaudarían por esa ocurrencia que tomaron los funcionarios de Tatiana Clouthier sin tomar en cuenta al Presidente, es de unos 64 millones de vehículos.

Multiplíquelo por mil pesos cada unidad para que vea el monto que sangrarían a los mexicanos con automóvil de esas fechas.

Por eso el Presidente salió a apagar el fuego de ese impuesto que, no se sabe si estaba enterado o no, pero su rostro a la pregunta en la mañanera lo delataba como un jefe sorprendido.

Lo vamos a revisar. No tenía yo conocimiento, hay decisiones que toman las secretarías y no se consultan; ahora estamos procurando que todo lo que perjudique la economía popular se consulte.

Eso se va a revisar, porque dijo que no vamos a estar bolseando a la gente.

Dicen los que saben, que al terminar la conferencia mañanera el Presidente se veía muy molesto por estas decisiones que se están tomando a sus espaldas, sobre todo porque afectan a la gente.

En consecuencia, el mensaje de no pasarse de listo o como dice el propio Ricardo Sheffield, de Profeco que no se pasen de roscas, el jalón de orejas fue para todo su gabinete.

Si el Presidente no hubiera tomado esa decisión en su conferencia para que públicamente le metiera reversa, sería una bocanada de oxigeno puro para los opositores que sin duda le atizarían hasta con la cubeta.

Por qué, bueno porque simplemente sería un impuesto disfrazado que exhibiría al gobierno en una incongruencia, prometió no más impuestos y ahí esta el primero, le gritarían sin duda. Ya de por si el alza en la gasolina está que arde pues con esto se agravaría sin duda esa confrontación gobierno-opositores.

Los automovilistas desde luego que pegarían el grito porque además de pagar dos veces al año, o cada semestre la verificación de 640 pesos, ahora sumarían esos mil pesos y quien sabe los requisitos para cumplirlo.

Vamos a ver que reacción tiene el Presidente sobre este problema que exhibió a la Secretaría de Economía la ruta de irse por la libre, vaya con total autonomía como si no existiera el mandamás de Palacio Nacional.

Habrá guillotina o AMLO dejará esa tarea a Doña Tatiana para que sea ella la que haga sus ajustes y corte de cabezas donde tenga que cortarlas.

Fuego amigo en Puebla por sucesión

Está más que claro que el lodazal en Puebla entre el gobernador Miguel Barboza y el coordinador de los diputados en San Lázaro, Ignacio Mier, no es más que un pleito casado por la lucha por la candidatura al gobierno del estado.

Está más que claro que las filtraciones de unos y otros, es precisamente porque se acercan las elecciones y se calientan motores. La información negativa, como es el caso de esta etapa de Nacho Mier, sin duda se tenía reservada y hoy anda circulando. Auténtico fuego amigo.

Pasa lo mismo en Veracruz, allá el gobernador Cuitláhuac García le echó todo el peso del gobierno al presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Gutiérrez. No lo quiere dejar pasar para que pueda lograr la candidatura para sucederlo, le está guardando el espacio a su jefa y amiga Rocío Nahle, actual secretaria de Energía.   

Son dos estados con las mismas características, los gobernadores defendiendo la sucesión, no aceptan extraños, por eso el lodazal de aquí hasta que se llegue la fecha del día D en 2024.

Apapacho a Monreal y Ebrard; Sheinbaum no con levadura de gansitos

Ricardo Monreal no se esperaba el apacho que le dieron en Cancún, en la gira que realizó para apoyar a la candidata al gobierno del estado, Mara Lezama.

Sorpresivamente le gritaron ¡Presidente! ¡Presidente! y no sabía como agradecer se gesto que sin duda le levanta el ánimo a cualquier aspirante a ese codiciado cargo.

Compite con Marcelo Ebrard y Claudia Sheinbaum, los tres andan desatados en este proceso electoral del 5 de junio donde se juegan seis gubernaturas.

Quintana Roo es uno de los más seguros que le pueda dar el triunfo a Morena, lleva la candidata Lezama 62 por ciento de aceptación, una verdadera masacre política a su adversaria del PAN y PRD, Laura Fernández.

Monreal recibió el apoyo de esa gente de Quintana Roo y Marcelo Ebrard lo mismo en Tamaulipas. A ver que pasa con Sheinbaum porque como dijera en el 2026 López Obrador cuando andaba en campaña a sus adversarios, no levanta ni con levadura de gansitos ¡Ah Claudia!