Por: José Antonio Chávez
Los opositores a Ricardo Monreal, antes de las votaciones estaban más que confiados, César Cravioto se mensajeaba con la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum para informarle que era un hecho que podían ganar la presidencia del Senado con Higinio Martínez.
No les duró mucho el gusto cuando recibieron el revés como balde de agua helada, la votación 36 a favor del monrealista, Alejandro Armenta y 28 para Higinio. Ganaron los chiles en nogada a la barbacoa de Texcoco, bromeaban los presentes en el patio del Senado.
Desde luego que el más contento era Monreal, el mismo que un día antes recibió una oleada de hielo seco y frío como un vacío a la convocatoria para su plenaria.
Lo dejaron vestido y alborotado el Secretario de Gobernación, Adán Augusto López y el líder del partido, Mario Delgado, obviamente en un mensaje de pleito abierto a navaja limpia por que de por medio está la candidatura presidencial al 2024.
Los opositores a Monreal desde el inicio de la legislatura le han metido leña al fuego amigo en la búsqueda de derrocarlo.
Conocer de las confrontaciones al interior de su propia bancada, Monreal con su experiencia los apapachó y les cedió el espacio para que designaran a Martí Batres al frente de la presidencia de la Cámara Alta en su primer año.
Con ese encargo de ceder el espacio, Monreal neutralizó a esa tribu de origen perredista que buscaba confrontarlo. Prácticamente los desarmó, no había más pretextos.
En el cuarto año que concluyó y que le tocó presidir a la ex ministra Olga Sánchez Cordero, con la llegada de los suplentes, César Cravioto en lugar de Martí Batres y Gabriel García, el superdelegado que fue despedido por el que manda en Palacio Nacional, inició un nuevo ataque.
Las malas lenguas soltaron que García venía al Senado a quitarle la coordinación a Monreal, que era la nueva encomienda de Palacio Nacional porque estaban muy pero muy enojados con él por la traición que les jugó al ganar el PAN, PRI y PRD 9 de las 16 alcaldías a Sheinbaum. Le echaron la culpa, obvio para tapar la ineptitud de gobierno.
Lógicamente que no sabían el juego del que manda en Palacio, Monreal ha sido el perfil idóneo para sacar las reformas presidenciales al inicio del sexenio. Ahí está la Guardia Nacional, el atropellado y contra su voluntad, del nombramiento de Rosario Piedra a la CNDH, los nuevos ministros, etcétera.
López Obrador sabe que Monreal es un personaje político con las tablas de lograr acuerdos con sus opositores, le sabe al tinglado y no por ser amigo del Presidente, sino por la vagancia política que ha adquirido al paso de los 30 años de hacer política.
Por eso ayer le comentaba que les dio la vuelta, con se vacío, a las remoras de Palacio y las corcholatas Sheinbaum y Don Adán.
Ahora no pierda de vista al nuevo presidente del Senado, Alejandro Armenta porque va que vuela perfilado para posicionarse como el candidato natural a gobernar Puebla y suceder a Miguel Barbosa, desde luego que en San Lázaro tiene la competencia, al también inminente presidente de la junta de Coordinación Política, Ignacio Mier.
Durango arranca como gobierno de coalición
No hay vuelta de hoja, para el bloque opositor que integra el PAN, PRI y PRD su prioridad es establecer el gobierno de Coalición con el Estado de México y que sirva de modelo para el país.
Ayer Marko Cortés del PAN, adelantó que ese modelo está en marcha ya en el gobierno de Durango que iniciará con el nuevo gobernador electo, Esteban Villegas.
Naturalmente que es de origen priista y trabajará de la mano con el presidente municipal de la capital, José Antonio Ochoa que asumió, ayer el cargo.
La Semana Pasada le comenté que se está cocinando un gobierno de coalición para el estado de México entre los tres partidos opositores y que buscan integrar a Movimiento Ciudadano de Dante Delgado.
Es una figura que, a decir de los líderes de esos partidos, permitirá distribuir los cargos equitativamente conforme le corresponda al porcentaje de votos de cada fuerza política. Ayudará que todos se sumen echarle toda la carne al asador para evitar la simulación y, en cambio, fortalecerse
Asume Creel la cámara; Mier la JUCOPO
Finalmente, en la Cámara de Diputados los coordinadores de todas las fuerzas obedecieron al diálogo y buena vecindad legislativa para dar paso, por unanimidad a los cargos al panista, Santiago Creel como presidente de la Mesa Directiva en sustitución del morenista Sergio Gutiérrez y al morenista, Ignacio Mier como presidente de la Junta de Coordinación Política en lugar del priista Rubén Moreira. Por lo menos en al