Por: José Antonio Chávez
El fin de semana las dos candidatas al gobierno del Estado de México, la priista, Alejandra del Moral y de Morena, Delfina Gómez, arrancaron su campaña rumbo a la gubernatura de junio para suceder al actual Alfredo del Mazo.
Se armaron de los mejores estrategas y comunicadores para atizarle a esta campaña que será, sin duda un pleito a navaja limpia.
La disputa será de marcas, los opositores que conforman el PAN, de Marko Cortés, el PRI de Alejandro Moreno “Alito”, el PRD de Jesús Zambrano y Movimiento Ciudadano de Dante Delgado.
Van contra la marca de AMLO, un registro que llevó a la Presidencia a López Obrador que venía luchando desde el 2006 cuando salió de la jefatura de gobierno de la Ciudad de México.
Las cifras están cerradas y no hay, en este momento una marca que sea la puntera, aunque por ser una entidad gobernada por el PRI le da una pequeña ventaja.
No pierda de vista que atrás de las candidatas están los estregas que mueven las piezas, por el lado de delfina Gómez de Morena y sus aliados del PT y Verde, se ubica a Horacio Duarte, un viejo lobo de mar en elecciones.
Por el PRI, Alejandro Moreno será, sin duda el que opere las campañas y no se sorprenda las confrontaciones con el propio Presidente López Obrador, que si bien no se le verá en los eventos de su candidata, si mandará los mensajes a través de las corcholatas.
Le cuento, la instrucción que se está construyendo para aplicar en los eventos, de Delfina, es que se escalonen las visitas de Claudia Sheinbaum, Adán Augusto y Marcelo Ebrard, si bien les va que vaya Ricardo Monreal.
La idea es participar en los templetes para replicar el mensaje del Presidente, que los opositores no tienen llenadera y que por eso quieren seguir en el poder, vaya todo lo quen habla en l mañanera de despotricar contra los conservadores. Van a aventar todo el lodazal que puedan como un laboratorio para el 2024.
Desde luego que Alito y los panistas y perredistas lo sabe, en consecuencia no los pierda de vista porque en sus cuartos d guerra están armando una bomba que prometen será expansiva para minar a los morenos.
En fin, de los dos lados saldrá fuego, pero la realidad es que se espera una campaña que será sin duda una replica de lo que se espera para la Presidencial del 2024, de eso no tenga duda.
Agresiones de taxis ahuyentan turismo en Cancún
Históricamente en Cancún han prevalecido las mafias de taxistas para operar sin competencia, desde luego que han sido un activo para los candidatos en tiempos electorales, vaya el famoso voto corporativo, una copia exacta de la CTM de Fidel Velázquez, además de la CROC y de la CNC.
Son una mafia avalada por las propias autoridades en turno, toda vez que flotillas de taxis o placas, pertenecen a políticos.
Hoy se han convertido en una amenaza contra el empresariado de la industria sin chimenea, vaya los hoteleros, restaurantes, prestadores de servicio y en de forma paralela al mismo gobierno de los tres niveles.
Desde la semana pasada han sido noticia mundial, en su intento por evitar que la plataforma de UBER de servicio a los turistas o quintanarroenses, los taxistas han interceptado esas unidades y les ha valido madre bajar a los pasajeros de nacionalidad extranjera, sin mediar el daño de imagen que han provocado.
Son familias de extranjeros que han padecido de estas mafias que los han obligado a descender de esos servicios de UBER para subir a sus unidades destartaladas y mugrosas. No permiten que nadie, absolutamente nadie se transporte en otros taxis que no sean los de ellos, vaya nada de UBER.
La semana pasada el Poder Judicial Federal dictaminaron sentencia de un amparo para que UBER pueda ofrecer sus servicios en el Estado de Quintana Roo. Tardaron tres años y al final lograron ganar.
Porque no quieren los taxistas que entre UBER, bueno porque como dato las tarifas en el Aeropuerto de Cancún, que llegan alrededor de unos 650 vuelos diarios, cobran por cada dejada entre 700 u 800 pesos. Mientras que UBER, su tarifa más alta sería de unos 200 a 250 pesos.
Que decir de esa mafia que se extiende a las agencias de camionetas colectivas en la terminal aérea con costos de 600 pesos por persona viaje redondo, es decir los llevan a l hotel y los recogen de y hacia al Aeropuerto.
Tienen capacidad de 12 pasajeros y generalmente una familia se integra de cuatro, dos adultos y dos menores, que tiene que sumir un costo de dos mil 400 pesos, en UBER redondo alcanzaría unos 500 pesos. Esa es la razón, y lo más grave la ceguera de los gobiernos, federal y local.
Las primeras consecuencias de ese despojo a turistas extranjeros y nacionales, como han sido registrados varios casos, es que Estados Unidos emitió la alerta para que no visiten Cancún porque no hay condiciones de seguridad por esos bloqueos de taxistas y esos despojos contra UBER y los pasajeros, vaya que pueden estar en riesgo incluso de su integridad física.
A ver si les cae el veinte a Don Miguel Torruco de Sectur y la gobernadora Mara Lezama, que andan más preocupados por viajar al extranjero para hacer la promoción turística.