Por: José Antonio Chávez
Pio López Obrador, hermano del Presidente Andrés Manuel López Obrador, arrancó la promoción de la campaña de Marcelo Ebrard y aseguró que éste garantiza la continuidad de la cuarta transformación.
Desde luego que la apuesta del hermano del Presidente es que Marcelo es la mejor propuesta para encabezar la candidatura de la 4T y con ellos dar certidumbre para el proyecto de su hermano.
Pero enfrente también está la contra de la misma familia, su otro hermano, José Ramiro, ex alcalde de Macuspana, Tabiertamente apoya a Claudia Sheinbaum. Entonces en la familia López Obrador está dividida y con ello sin duda no hay cargada.
A Claudia Sheinbaum le restaron puntos su actitud de reclamo y queja al gobernador de Sonora, Alfonso Durazo en la pasada asamblea donde se conjuntaron con su líder las cuatro corcholatas, Ricardo Monreal, Adán Augusto y Marcelo Ebrard, para dar a conocer los lineamientos de la campaña en defensa del proyecto de la Cuatro T.
Marcelo Ebrard arrancó primero su carrera de campaña y puede apostar que ha madrugado a Sheinbaum.
Si bien hay voces que critican su forma de hacer campaña o promocionarse, también es cierto que ha levantado ámpula por sus peculiares formas de ofrecer sus propuestas, de sus traslados en VW y de sus bailes con vestimenta no muy acorde por sus playeras que no le dan una buena imagen de estética.
A pesar de la cargada de gobernadores y el apoyo total para Sheinbaum, la realidad es que no levanta, como decía el propio Presidente ni con levadura de gansito.
Naturalmente que ese escenario les ha generado una mayúscula preocupación que la llevó al desesperación en ese video citado con Alfonso Durazo donde le reclama los gritos negativos y de reclamos en su llegada al evento y que ya no aguanta más.
Dicen los que saben que le está doliendo los reclamos por los accidentes del Metro, que la han increpado y reclamado y que no se vale porque ya está cansada de esos insultos. Que no se vale, vaya.
Basta recordarle a Sheinbaum que se le está regresando los insultos contra Ricardo Monreal, esas voces de gente enviada, obviamente de su gobierno para increpar al entonces líder de la Cámara Alta con frases de traicionero por aquella derrota de 9 de las 16 alcaldías de la Ciudad de México.
Dice el refrán que todo se paga y Sheinbaum está sufriendo las mismas consecuencias que ella provocó contra su par Monreal, en un pleito añejo y a navaja limpia que data desde la elección para la candidatura del 2018 a la jefatura de gobierno de la CDMX.
Hoy la lucha por alcanzar la candidatura presidencial brotará, sin duda el lodazal por abajo del agua, como fue el primer golpe a Ebrard en la mañanera con el Presidente López Obrador, por temas de negocios de corrupción.
Ahora vamos a ver la respuesta que le contestan a Sheinabum y que saldrá a la luz porque puede asegurar que ni Ebrard ni Adán Augusto se quedarán callados. El lodazal apenas está por salir.
Agasajo de bienvenida a Eduardo Ramírez
El presidente del Senado, Alejandro Armenta apapachará, hoy al nuevo mandamás de los senadores, Eduardo Ramírez.
Compartirá el pan y la sal y para ofrecerá alta cocina de bocadillos y platillos regionales de su natal Puebla.
Será la bienvenida a ese cargo que heredó de su amigo Ricardo Monreal como presidente de la junta de Coordinación Política, punto donde se parte el queso con sus pares de los otros partidos para la agenda legislativa, además de coordinador de la bancada de Morena.
Eduardo Ramírez tendrá con este cargo su prueba de ácido pues será su trampolín para buscar la candidatura de Morena para gobernar Chiapas. Enfrente tiene al titular del IMSS, Zoé Robledo pero la gran diferencia es que el primero puede recibir el respaldo de Manuel Velasco y su partido Verde para negociar y llevarlo como aspirante único.