Por: José Antonio Chávez
Marcelo Ebrard prendió focos rojos en Palacio Nacional por desnudar que su adversaria por la candidatura Presidencial, Claudia Sheinbaum, no cede en sus acarreos.
Ebrard acusó que hay preocupación de Sheinbaum que no se ha cansado de mandar campañas de brigadeo para favorecerle en las encuestas que, a decir del ex canciller, ella va abajo y esa es su preocupación.
En ese sentido Ebrard exigió al líder nacional de Morena, Mario Delgado que haga cumplir los acuerdos firmados, porque hoy andan desatados los acarreos, y una campaña de intimidación, obviamente, dijo que se debe por que le van ganando en las encuestas y quieren impedirlo.
La exigencia es también qué, por estar en la antesala de la etapa decisiva, arreciaron esos acarreos, y ataques.
Claudia Sheinbaum desde que arrancó este sexenio, el Presidente López Obrador no disimuló su respaldó, la cobijó y más cuando recibió severos reclamos por los accidentes del Metro.
Para nadie es secreto que inició como la favorita del Presidente, sin embargo, al desnudar esa postura Presidencial, López Obrador intentó cambiar la estrategia mediante la repartición de cargos para los cuatro aspirantes conocido como corcholatas.
Es decir, los acuerdos en primer lugar fue el de cerrar filas para garantizar unidos el triunfo en el 2024, segundo, los que quedaran en segundo, tercero y cuarto lugar les correspondería, como premio de consolación el liderazgo del Congreso, unos a la Cámara de Diputados y otro al Senado, mientras que el resto como dirigente del Partido y, aunque no se dijo, hasta la jefatura de la Ciudad de México.
Atajo con esa estrategia el Presidente porque había una serie de inconformidad de Marcelo Ebrard y del propio Ricardo Monreal que denunciaban, abiertamente la cargada a Sheinbaum.
Ahí están las cifras de los gobiernos a favor de Sheinbaum, el exceso de publicidad de forma grosera con espectaculares y bardas, etcétera.
Ricardo Monreal había denunciado que no permitirían la imposición de una candidatura que viniera de Palacio Nacional. Después lo secundó Ebrard. El ambiente al interior de Morena se calentó y eso obligo al Presidente bajarle en sus apapachos a Sheinbaum.
Ellos, Ebrard y Monreal mantenían la advertencia de salir, incluso de Morena si se consumaba esa imposición que, para nadie es secreto esta a favor de Sheinbaum.
Bueno, hoy ese escenario parece repetirse con Marcelo Ebrard, pues en sus números él ha informado que lleva las preferencias en las encuestas y que no va a dejar que le hagan trampa para cucharear, literalmente a favor de Sheinbaum.
No pierda de vista que el hoy ex secretario de Gobernación, Adán Augusto desnudó que en el 2018 le robaron el triunfo a Monreal con la encuesta que realizaron en Morena para favorecerle a Sheinbaum, fue una acusación más que grave que hoy parece estar en la antesala de repetirse, solo que la víctima puede ser Ebrard.
El 6 de septiembre es la fecha del plazo que marcaron para dar a conocer quién será el o la ganadora de la candidatura Presidencial, pues está en puerta la selección de las encuestadoras que participarán pero que finalmente, será la de Morena que defina.
El pleito que arreció de Ebrard contra Sheinbaum, levantó expectativas si habrá ruptura por considerar que no se respetó los acuerdos y se favoreciera, como era bola cantada a la ex jefa de gobierno. El 6 de septiembre, cuando se de la noticia, sabremos la reacción de las corcholatas perdedoras, se van o se quedan.
Casa por casa: Xóchitl 32 vs 29 de Beatriz
La encuesta del Frente Amplio por México con las tres aspirantes por la candidatura Presidencial, del 11 al 14 de agosto, por la vía telefónica le dio una ventaja de 51 por ciento a Xóchitl Gálvez contra 17 por ciento de Beatriz Paredes. Santiago Creel con 18 por ciento y Enrique de la Madrid 13.5 por ciento.
Sin embargo, en la encuesta casa por casa de esas que le llaman por tierra, se acortó la brecha de Xóchitl Gálvez con Beatriz paredes, es decir la primera alcanzó 32 por ciento contra 29 por ciento, un empate técnico prácticamente. Creel alcanzó el 21 por ciento y De la Madrid el 16 por ciento.
Mientras que en la medición ponderada, Xóchitl Gálvez 38. 3 por ciento, Beatriz Paredes 26 por ciento y Creel 20 por ciento, abajo y cuarto lugar De la Madrid con 15.6 por ciento.