DEACERO invertirá mil millones de dólares en los próximos tres años para fortalecer su modelo de negocio basado en reciclaje de chatarra
Aunque el concepto de economía circular ha cobrado notoriedad global en los últimos años en México una acerera lleva décadas con ese modelo de negocio al ser el mayor reciclador de chatarra del país.
Me refiero a Grupo DEACERO que tiene como mandamás a Raúl Gutiérrez Muguerza que por más de siete décadas ha apostado por producir acero a partir de reutilizar residuos y convertirse en el líder en el segmento de aceros largos con 39 por ciento del mercado mexicano.
La historia de DEACERO se remonta a 1952 como un pequeño fabricante de cercas y alambres en Monterrey, y actualmente es él uno de los proveedores de alambre metálico más grande del mundo con operación en Estados Unidos y presencia en más de 20 mercados internacionales.
DEACERO tiene capacidad para producir 4.5 millones de toneladas de acero al año y más de 1.4 millones de toneladas de alambre a partir de la gestión de 32 centros de reciclaje que involucra a miles de recolectores de residuos, y que ha logrado un manejo muy cuidadoso de sus procesos al limpiar la chatarra que millones de mexicanos generamos que incluso importamos.
Para que tenga idea de ese gran esfuerzo DEACERO utiliza apenas un metro cúbico de agua por cada tonelada de acero que produce cuando el promedio de la industria a nivel mundial es de 3 metros cúbicos en lo que Gutiérrez Muguerza ha llamado “inteligencia industrial”.
DEACERO además cuenta con el índice de generación de CO2 por tonelada más bajo en el país, y se ha propuesto reducir en 56 por ciento la intensidad de esas emisiones para 2030.
Esos números no serían posibles sin miles de horas de investigación y mejoras continuas en sus procesos, además de recursos cuantiosos donde la acerera ha decido invertir mil millones de dólares en los próximos tres años en una apuesta por el acero verde que significará reciclar más de 4.7 millones de toneladas de acero al año.
Para el CEO de DEACERO el modelo de inteligencia industrial puede replicarse en otros sectores con ciclos virtuosos de producción que permiten a la población acceder a una prosperidad sostenible al ayudar al medio ambiente, además de tener un gran impacto social en las comunidades y que puede ser muy útil ante los nuevos desafíos que encara la economía mexicana de cara al cambio climático.
La ruta del dinero
El escenario para bajar las tasas de interés se torna complicado no sólo por la subida del dólar, también por los precios. Para los analistas de Banorte la próxima reunión de política monetaria del Banco de México, a celebrarse el 27 de junio, estará influida por el repunte en los precios de los alimentos que puede incidir en una inflación más alta en este año y el próximo. Ante tal escenario el banco central dejaría sin cambio su tasa de referencia en 11 por ciento.
La nueva expectativa en materia de tasas del grupo financiero que preside Carlos Hank González es de estabilidad de aquí a fin de año, y donde podría darse un ajuste de 25 puntos base en la reunión de diciembre próximo, claro está, en función del escenario macroeconómico que se presente en el segundo semestre de 2024.
POR ROGELIO VARELA
@CORPO_VARELA