Aproximadamente el 20% de los ciudadanos del país aún no dispone de un servicio de Internet que permita llevar a cabo distintos trámites burocráticos de forma no presencial en el país.
La desigualdad tecnológica en la interacción digital con las entidades públicas continúa siendo una de las asignaturas pendientes para más de 23 millones de personas en México, que continúan sin disponer de una identidad digital que les permita llevar a cabo distintos trámites y gestiones burocráticas a distancia. Así, según la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH) en su última edición, solo uno de cada tres ciudadanos utiliza su conexión a Internet para interactuar con el Gobierno debido, entre otros factores, a la baja penetración de la digitalización en zonas rurales o marginadas que, según el ENDUTIH, afecta a aproximadamente el 17% de la población.
A pesar de que desde el Gobierno se está impulsando la puesta en marcha de distintas herramientas como la Cédula Única de Identidad Digital -que unifica la identificación del ciudadano en un soporte físico o digital para facilitar trámites con la administración- o Llave MX -plataforma de identidad digital implementada por el Gobierno para agilizar trámites burocráticos de forma digital-, que pretenden reforzar la seguridad del usuario en sus trámites con la administración, la ausencia o la falta de robustez de las conexiones a Internet del país continúan siendo un problema para muchos mexicanos en su relación con la administración.
Para colaborar en la democratización de la verificación de la identidad del usuario, Identy.io, compañía internacional líder en soluciones de identificación biométrica sin contacto y gestión de credenciales digitales, ha desarrollado una serie de soluciones de autenticación del usuario mediante huella dactilar o rostro que procesan toda la información del usuario en su propio celular -sin requerir para ello terminales de última generación, solo necesitando que cuenten con una cámara y flash-, evitando así la necesidad de conectarse a Internet en cada verificación.
Una vez completado el proceso de onboarding, por el que las soluciones de Identy.io comprueban que la información biométrica capturada por el usuario en su celular le pertenecen realmente, se genera una credencial digital que se almacena automáticamente en el celular del usuario bajo altos estándares de encriptación, de tal forma que solo su propietario puede acceder a esta información. Además, y para garantizar la seguridad de esta información frente a posibles robos o fraudes de identidad, el usuario puede elegir en todo momento qué información personal se comparte, cuándo y a quién.
De esta forma, las soluciones de Identy.io se confirman como aliadas para el usuario en su seguridad, pero al mismo tiempo, también para las entidades públicas, que reducen la posibilidad de sufrir fraudes de todo tipo. Estos fraudes pueden afectar a la realización de trámites oficiales -licencias de conducir o registros en el RFC-, al historial crediticio de los usuarios -provocando perjuicios económicos a las entidades financieras-, el acceso indebido a beneficios sociales -especialmente, en apoyos de programas como Bienestar o becas de estudio-, una importante sobrecarga administrativa -para procesar las denuncias, investigar los fraudes y corregir registros en los sistemas del SAT, el INE o el Registro Civil, o el incremento de litigios legales -por demandas de las víctimas ante instancias como la FGR o la CONDUSEF-, entre otros.
Además de contribuir a dotar de una identidad digital a aquellas personas que, bien por la escasez de infraestructura para garantizar una adecuada conexión a Internet en la región en la que viven, o bien por la imposibilidad de registrar la identidad del usuario en comunidades indígenas o zonas rurales, la tecnología propietaria de Identy.io con prueba de vida (liveness) supone una capa adicional de seguridad que hace que sea prácticamente imposible acceder a las credenciales de identidad del usuario o falsificarlas, haciendo que ataques mediante inteligencia artificial o con duplicaciones de huellas con réplicas exactas de la huella digital en moldes de silicona sean directamente descartados sin poner en riesgo la identidad del usuario. Todo ello, permitiendo llevar a cabo transacciones consideradas como críticas, tanto como con las administraciones públicas como con entidades bancarias u otras instituciones financieras (AFORES, por ejemplo), con un respeto máximo a la privacidad de datos del usuario.
Según Jesús Aragón, CEO de Identy.io, “nuestras soluciones juegan un papel muy importante para facilitar las transacciones y las gestiones con las entidades gubernamentales, haciendo que cualquier persona pueda identificarse adecuadamente para ello desde su propio celular. Al no requerir un intercambio continuo de información con una plataforma en la nube o con servidores de terceros, estas soluciones se pueden utilizar prácticamente en cualquier momento sin depender de una conexión a Internet, lo que reduce al mínimo los requisitos de acceso a esta tecnología”.
Las soluciones de Identy.io no solo ofrecen un interfaz seguro y fácil de utilizar para el usuario final, sino que también contribuyen a aumentar la eficiencia y la rentabilidad en su uso para las entidades públicas y privadas que las implementa, al no necesitar de costosas inversiones en infraestructuras de terceros o de gestión en la nube para almacenar y gestionar las credenciales digitales de los usuarios. Además, cumplen con los máximos estándares de seguridad, como los propuestos por el NIST (National Institute of Standards and Technology) norteamericano, al respaldar procesos eKYC (“Conozca Digitalmente a su Cliente”, por sus siglas en inglés) y marcos AML (contra el blanqueo de capitales), además de cumplir la norma ISO 30107-3 sobre prueba de vida (liveness), lo que garantiza la seguridad y la precisión de su cartera de aplicaciones de gestión biométrica de identidad.
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