Por: Esty Dwek Roditi, Especialista en Inversiones de Natixis IM
El panorama para el 2018 es relativamente optimista, sin embargo, en aras de una visión más balanceada, a continuación, presentamos los 10 mayores riesgos para el 2018:
- Todo lleva un consenso. Muy pocas opiniones (incluyendo la nuestra) difieren del consenso –¿Cuánto más podemos todos estar en lo correcto? Si el mercado es complaciente, ¿Qué pasará cuándo despierte?
- El crecimiento se tambalea. El factor principal que apoya el rally actual (especialmente en renta variable), es la convicción en un constante y robusto crecimiento global. ¿Qué pasará si empezamos a ver fallas en el panorama de crecimiento, o si una de las grandes potencias económicas empieza a tambalearse?
- Los bancos centrales se vuelven más restrictivos. El mercado sabe que los principales bancos centrales podrían retirar su estímulo al mismo tiempo. Pero si los bancos centrales se vuelven más agresivos antes de lo esperado, los mercados se asustarán. Y si el Banco Central Europeo se queda sin bonos y finaliza su programa de estímulo cuantitativo antes de septiembre, podría también ahuyentar al mercado de bonos, junto con el alto rendimiento europeo. Finalmente, a medida que decae la liquidez, aumentan los riesgos de una entidad sobre -apalancada dejada a su suerte.
- Volatilidad. Esperamos que la volatilidad se eleve gradualmente desde niveles extremadamente bajos, pero los mercados se han vuelto algo complacientes, y si los mercados repentinamente experimentan muchos más giros violentos, el rally podría estar en riesgo. Y existen muchos eventos a futuro que podrían causar una volatilidad más alta (ver abajo Políticas y geopolítica).
- Valoraciones. Ningún mercado –ya sea renta variable o bonos – es actualmente barato. Las valoraciones prolongadas podrían empezar a influir en el sentimiento del mercado, especialmente si el crecimiento muestra señales de ralentización. Ahora mismo, el crecimiento está apuntalando a los mercados de renta variable, a la vez que la utilidad continúa mejorando – es decir, los mercados están ignorando las valoraciones porque las ganancias son sólidas– pero si el soporte del crecimiento falla, los mercados podrían volverse menos optimistas.
- Inflación / Dólar más fuerte. Esperamos que la inflación gradualmente se eleve hacia un 2% en EEUU, pero si esto sucede más veloz o por encima de lo esperado, el dólar podría apreciarse, y por tanto las condiciones monetarias más estrictas de facto para el resto del mundo (riesgo para los Mercados Emergentes).
- Acumulación del rendimiento. Por mucho tiempo los rendimientos no han cambiado (terminamos el año tal como lo empezamos), y con las expectativas de inflación limitadas, no se espera que se eleven mucho tampoco. Pero si se acumulan repentinamente, los mercados podrían asustarse con facilidad.
Asimismo, si la curva de rendimiento invierte la recesión las preocupaciones podrían aumentar (aunque históricamente siempre se ha registrado un tiempo de entrega largo).
- El retorno del populismo. Las elecciones en Europa concluyeron en su mayoría con los resultados ‘correctos’ en 2017, pero el populismo no se ha desvanecido. Alemania aún no cuenta con una coalición (con una sólida oposición del partido de extrema derecha), Italia celebrará pronto elecciones, así como México. El populismo aún puede impactar a los mercados, aunque ya no haya rastro de Le Pen.
- Geopolítica. Las noticias actuales no desaparecerán fácilmente: entre Corea del Norte, Rusia, las guerras comerciales, el techo de la deuda, Brexit, Trump y más, podríamos aún presenciar una mala noticia.
- La decepción de la revolución tecnológica. Las grandes compañías tecnológicas ya no son percibidas como una disrupción positiva /generadores de valor, lo que conlleva a una reversión en el sentir. Hoy día, las FAANGS (Facebook (FB), Amazon.com (AMZN), Apple (AAPL), Netflix (NFLX), y Alphabet (GOOGL), son percibidas como algo positivo para los consumidores, pero si esto cambia, podría también impactar al mercado en general.