Empezamos el año manteniendo nuestra perspectiva de que la economía mexicana presentará una buena dinámica de crecimiento (+3.5% anual) durante el 2012. A pesar del contexto internacional adverso, los últimos reportes relacionados con la actividad manufacturera en EEUU sugieren un dinamismo mejor a lo esperado de este sector, lo cual se trasladaría a un mayor crecimiento de la producción manufacturera y de los servicios relacionados con dicho sector en México. De igual forma, la fuerte depreciación que observó la divisa mexicana en la segunda mitad del 2011 podría incentivar una mayor demanda por bienes manufactureros mexicanos durante la primera mitad del 2012, lo cual se trasladaría a un mayor dinamismo de la producción industrial. De esta forma, estimamos un crecimiento de 3.6% para la industria manufacturera durante el 2012.
Aunado a esto, pensamos que la expansión del gasto público durante la primera mitad del 2012, derivado del proceso electoral que se llevará a cabo en julio, podría impulsar la demanda interna. De acuerdo a nuestros estimados, el gasto de los estados se incrementó a partir del cuarto trimestre del 2011 y mantendrá un alto ritmo de crecimiento durante la primera mitad del 2012. Con ello, esperamos que el gasto de gobierno alcance un crecimiento de 5.9% durante el 2012 (vs -2.8% en el 2011). Así, el gasto del gobierno contribuiría en 1.0 puntos porcentuales al crecimiento del producto interno bruto del 2012.
Consideramos que el consumo privado podría presentar una menor dinámica de crecimiento durante el 2012. En particular, la crisis fiscal europea y la alta dependencia de la banca mexicana a Europa podrían frenar la dinámica del crédito al consumo durante la primera mitad del año. Así, el consumo privado presentaría un crecimiento de 3.4% durante el 2012 (vs 4.7% en el 2011).
Respecto al mercado laboral, esperamos una creación de 450,000 nuevos empleos en el 2012, la cual resultaría menor a la creación de 590,000 empleos durante el 2011. Creemos que el dinamismo que hasta ahora ha mostrado el empleo formal se mantendrá durante el primer semestre del 2012, motivado en parte también por el fuerte gasto de gobierno, lo cual impactará de manera positiva al ingreso agregado de la economía en la primera mitad del año. Finalmente, esperamos que la tasa de desocupación alcance un nivel de 4.8% durante el 2012 y cierre el año en 4.5%.