Por José Antonio Chávez
Al ex líder de la bancada de diputados panistas en San Lázaro, Marko Cortés no le gustó nada de nada la actitud de los senadores que coordina Damián Zepeda en la sesión anterior donde abandonaron el recinto porque Morena los aplastó con su mayoría en recortar los tiempos de participación.
Les falto, dirían en el argot popular del barrio echarle más huesos y talento, pues no pueden salirse así nomás sin mostrar las tablas para enfrentarlos. Deben entender que ese será el escenario de todo el sexenio.
Tal vez por ello Marko Cortés se mostró molesto, él fue coordinador de los diputados panistas en San Lázaro y basta recordar que, entre otra oposición mostrada echaron atrás la mayoría del PRI que quería imponer el pase automático del fiscal a modo.
No quiere decir que en la Cámara alta puedan tener esa misma fuerza, no, desde luego que no, pero la queja es que ni siquiera le hicieron la lucha, por eso su mandamás Zepeda tal vez se tambalea.
Para nadie es secreto que Cortés va que vuela para la dirigencia nacional de su partido y convertirse, obviamente en el próximo líder del PAN.
Lleva las de ganar si tomamos en cuenta que la balanza se inclina a su favor, aunque su idea es lograr consensos al interior del partido para salir fortalecidos en esta elección venidera.
La semana pasada entrego parte de las firmas que se necesitan y este lunes hará lo propio, busca con ello cumplir los requisitos.
Dicen los que saben que la idea de convencer registra con su llamado simplemente a la militancia de fortalecer el partido para convertirse en la oposición con mayor fuerza que permita ser contrapeso del partido de Andrés Manuel López Obrador –Morena- que se ha convertido en una fuerza aplastante por sus mayorías en el Congreso.
Que hoy el PAN tiene la oportunidad de oro para convertirse en la oposición que México necesita ante este nuevo contexto político de enfrentar un partido y su gobierno electo que no cesaran en cada oportunidad de aplastar con su mayoría.
Sabe Cortés que solo les quedan dos meses para armarse en el contragolpe que iniciara Morena a partir del 1 de diciembre que se conviertan en gobierno. Sabe que si los panistas no reflexionan y cierran pinzas, difícilmente podrán enfrentar a ese monstruo con tintes de PRIeto.
Suman 13 gobernadores panistas como respaldo que no son poca cosa si tomamos en cuenta la aplastante derrota que sufrieron en las elecciones pasadas que perdieron el Congreso y disminuyo su número de legisladores aunque ocupan hoy la segunda fuerza.
En el PRI, su líder Claudia Ruiz Massieutambién alzo la voz para sacudir a los priistas, legisladores y más a convertirse en una verdadera oposición, pues les dejo entrever que siguen pensando, algunos, que todavía son gobierno. No, deben entender que hay que entrarle ya.
Los senadores priistas que comanda Miguel Angel Osorio Chong, que además de ser una minoría muy, pero muy pequeña, comparada con la anterior, sufrieron una aplastante humillación de Morena del mandamás Ricardo Monreal. Los obligó a abandonar el pleno y dejarlos votar a sus anchas, tal vez les faltó oficio, al igual que los panistas.
En fin, dicen los que saben que si no se ponen las pilas, no solo los aplastaran, sino hasta los borraran del mapa electoral para las próximas que vienen.
PLACEA AMLO EN SONORA Y BC A DURAZO, GUEVARA Y BONILLA
La visita de Andrés Manuel López Obrador por los estados de Baja California y Sonora fue significativa tanto para el Presidente Electo como para los gobernadores, Francisco “Kiko” Vega y Claudia Pavlovich.
De entrada, muy bien a los gobernadores porque AMLO refrendo el compromiso de cumplir las promesas de campaña y ayudar a resolver en conjunto la problemática de las dos entidades, si de Presupuesto se trata por eso lo acompaño el mandamás de San Lázaro, Mario Delgado. Y segundo, le fue bien al propietario de Morena porque pudo placear a los probables aspirantes a candidatos, en BC a Jaime Bonilla que, hoy es senador pero en diciembre pasará a la Coordinación Estatal, algo así como vicegobernador y listo para el 2019.
En tanto en Sonora, hay dos figuras, Alfonso Durazo y la velocista Anna Guevara, que están más que listos en la línea para la gubernatura que está a escasos tres años para suceder a Pavlovich, emanada del PRI que hoy no tiene nada que hacer.
MIERCOLES RINDE PROTESTA EL PRIMER GOBER
El miércoles asumirá como gobernador el panista Diego Sinhue, en Guanajuato, el primero de los nueve nuevos mandatarios que ganaron el pasado primero de julio. Acompañarán a AMLO en el sexenio que arranca el primero de diciembre.
Es el primero de las elecciones pasadas, mientras que para el primero de octubre anote también a los estados de Morelos con el primer gobernador de Morena, Cuauhtémoc Blanco y Yucatán con el panista Mauricio Vila.
