Por Rogelio Varela
En materia de traiciones a la patria las cabezas de la 4T harían bien en investigar al exdelegado del IMSS en Tamaulipas, Roberto Hernández Báez, quien podría fácilmente llenar varios expedientes debido a su cuestionable desempeño como funcionario público durante la administración de Enrique Peña Nieto.
Fue a inicios de 2016 cuando el gobierno priista lo nombró delegado regional en la entidad ahora gobernada por Francisco Javier García Cabeza de Vaca; así, a partir de ese momento se desataron una serie de irregularidades en las contrataciones públicas.
Todo parece indicar que mientras Hernández Báez gastaba fortunas que hacía pasar como pago de viáticos, no realizaba las tareas a su cargo en materia de revisión de contratos, motivo por el que varios de ellos se firmaron con severos sobrecostos.
Así, aunque al momento aún no hay un cálculo estimado de los posibles daños al erario público, el médico cirujano sí ha sido señalado en reiteradas ocasiones por estar relacionado con actos de corrupción.
Pero eso no es todo, ya que parece que sentó precedentes y el actual delegado en el estado, Fernando López Gómez, podría repetir sus pasos mediante el actual proceso PC-050GYR018-E76-2019, para la adquisición de tóners, pues figura como un traje hecho a la medida de LEXMARK, empresa que en México dirige Isaac Bessudo.
Se lo digo porque aunque en ocasiones previas la Secretaría de la Función Pública (SFP), que ahora encabeza Irma Eréndira Sandoval, recomendó que las compras de este insumo se realizarán en modalidad Internacional Abierta, la emprendió mediante Licitación Nacional, proceso que favorece directamente a la proveedora estadounidense.
Sin embargo, no es la única delegación que dio muestras de afinidad a la empresa, pues en la Delegación de Guanajuato, al mando de Jorge Manuel Sánchez, emprendieron el proceso LA-050GYR027-E54-2019 bajo estas mismas características, pero ahí sí le hicieron caso a la Función Pública y esta misma semana el concurso se declaró desierto.
Ahora se espera que lancen un nuevo proceso que sí incentive la sana competencia y que se traduzca en ahorros para el IMSS, de Germán Martínez, lo que también podría ser replicado en Tamaulipas y otras delegaciones más.
La ruta del dinero
La revisión a las compras del gobierno de medicinas se dirige hacia el sinuoso terreno de las asignaciones directas desechando los procesos de subastas que han generado ahorros y eficiencias al sector público. Esa es la postura de la secretaría de Hacienda de Carlos Urzúa quien incluso buscará que en ese proceso lo asista la ONU. El caso es que las compras consolidadas organizadas por el IMSS permitieron entre 2013 y 2018 ahorros por 17 mil 592 millones de pesos, además que elevó el número de unidades adquiridas para ampliar su cobertura y hacer más eficiente su abasto. Un tema que no es menor ahora que se buscará cambiar las reglas son los adeudos que el gobierno federal y algunos estados como parte del Sistema Nacional de Salud (SNS) tienen con los laboratorios farmacéuticos. Hablamos de cuentas por pagar que rebasan los 15 millones de pesos, y que pese a su monto, no han afectado que se siga entregando producto a la red de hospitales y clínicas del sector salud.
