Por Rogelio Varela
Vaya que el IMSS, a cargo de Zoé Robledo, tiene una misión que se ve imposible, pues el objetivo de este funcionario será el estabilizar las finanzas del instituto, garantizar el acceso a la salud de todos los derechohabientes, así como la proveeduría de medicamentos y servicios, pese a que la inversión en infraestructura y equipamiento se redujo hasta en un 80% en comparación con el año pasado.
Sin embargo, en esta ocasión se trata de desplegar una serie de irregularidades ocurridas en diversas delegaciones estatales del IMSS, en donde todo indica que la corrupción y los moches siguen siendo cosa de todos los días, específicamente en la compra de tóner y consumibles en entidades como Guanajuato, Veracruz y Tamaulipas, un tema que este columnista ha seguido muy de cerca.
Veamos caso por caso, siendo la Delegación Estatal Tamaulipas del IMSS, al mando de Fernando López Gómez, en donde se delató un presunto fraude tras la licitación LA-050GYR018-E97-2019, ya que se compraron equipos de impresión nuevos, y la empresa Toners y Tinta Express del Norte los entregó usados, bienes que incluso le pertenecían a Grupo Barolhver. En este hecho se investigó por presunto contubernio a la marca Lexmark, que en México comanda Issac Bessudo.
En la Delegación Veracruz Norte, de Candelario Pérez Alvarado, se detectó que luego de la licitación LA-050GYR014-E125-2019, para la adquisición de Tóner, existieron proveedores que exhibieron folletos e información técnica falsa sobre los bienes a ofertar, con el fin de simular que cumplieron con los requerimientos. En dicha farsa, en el IMSS se señaló a la empresa AP Química Industrial y, de nueva cuenta, estuvo inmerso en el proceso la firma Lexmark.
Por último, tenemos el caso de la delegación Guanajuato, que lleva Jorge Manuel Sánchez González, donde la empresa Sacomer Internacional, pese a ofertar con sobreprecios, ganó la licitación LA-050GYR027-E125-2019. Aquí, fuentes del instituto señalan un proceso amañado desde la Coordinación de Informática, de Rafael Antonio Guardado Fuerte, quien ya en 2018 fue señalado por beneficiar, adivino usted, a la marca Lexmark, que a nivel mundial comanda Allen Waugerman.
Y vaya que el daño patrimonial al IMSS es grande, pues estos tres procesos suman contratos por más de 40 millones de pesos, siendo lo más preocupante que parte de estos recursos podrían terminar en los bolsillos de los funcionarios que intervienen en los procesos, por lo que el sector urge a que la Secretaría de la Función Pública (SFP), de Irma Eréndira Sandoval, y la Auditoría Superior de la Federación (ASF), de David Colmenares, investiguen de fondo el actuar de dichas delegaciones.
Así, se trata de una cadena de irregularidades en las compras de consumibles de equipo de cómputo que podría convertirse en el modus operandi de otras delegaciones, situación que ni el presidente Andrés Manuel López Obrador, ni Zoé Robledo permitirán se mantenga.
La ruta del dinero
Antes de solicitar licencia como gobernador de Campeche, Alejandro Moreno Cárdenas entregó ayer el nuevo Puente de la Unidad, una obra que requirió una inversión cercana a los 2 mil millones de pesos y que tiene longitud de 3.2 kilómetros, lo que facilitará la movilidad en el sureste del país.
