Rogelio Varela
La siguiente semana, la Academia Mexicana de Impacto Ambiental (AMIA), que preside Daniel Basurto, llevará a cabo en Mérida, Yucatán, el Tercer Congreso Nacional de dicho organismo, en donde se reúnen sector empresarial, académico y social para debatir temas de agenda nacional que tienen que ver con la Política Ambiental que se está desarrollando en la actual administración.
Entre los invitados destaca la presencia de la Semarnat, de Víctor Manuel Toledo, y la SEDATU, de Román Meyer Falcón, en cuanto a autoridades locales estará la Secretaría de Desarrollo de Medio Ambiente del Estado, Sayda Rodríguez Gómez, el presidente municipal de Mérida, Renán Alberto Barrera Concha, así como el gobernador de la entidad, Mauricio Vila Dosal, entre otros.
Es de prever que habrá mesas que subirán de tono cuando inexorablemente se debatan los proyectos que han sido parte del debate nacional y que son un gran referente para conocer si debemos fortalecer las instituciones administrativas, fortalecer el régimen de Derecho o defender el Instrumento de Política Ambiental llamado: “Manifestación del Impacto Ambiental”.
El organismo que comanda Basurto González ha sido de los principales en levantar la voz en cuanto al tema de los estudios de impacto ambiental del Aeropuerto de Santa Lucía, los cuales ha calificado de imprecisos. Advierte que la construcción de esta obra traerá consigo afectaciones a los ecosistemas que la rodean y a las poblaciones de alrededor.
Afectaciones como desabastecimiento de agua, remoción de árboles y una mala calidad del aire por todas las emisiones de gas y polvo producto de la operación de un aeropuerto. Sin mencionar las atribuciones ambientales que erróneamente se le han adjudicado a dependencias como la SEDENA.
La AMIA se conforma por más de 200 expertos y desde el 2013 busca colocarse como un órgano obligado de consulta de las autoridades ambientales e interlocutor público en términos de políticas, planes y programas. El congreso que organizará podría poner en la agenda pública un tema que no debemos olvidar: el impacto ambiental. Por demás interesante.
La ruta del dinero
Fíjese que al interior de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) hay inquietud porque más allá del expediente de su director, Manuel Bartlett Diaz por la supuesta acumulación de bienes en su historial como funcionario público ahora se ha destapado un tema que podría dejar muy mal parado al presidente Andrés Manuel López Obrador en su lucha contra la corrupción. Y es que han comenzado a presentarse quejas del quehacer de la Dirección de Distribución de la CFE por revelaciones de extorsión de varios empresarios lo que ha encendido las alarmas en la dependencia al frente de Irma Eréndida Sandoval Ballesteros.