Para reducir el riesgo de contagio del coronavirus COVID-19 en México, en estos días las escuelas de estados como Jalisco, Michoacán, Veracruz, Tamaulipas, Guerrero, Morelos y la Ciudad de México comenzaron a suspender sus clases, mientras que otros estados acatarán esta medida al finalizar la semana. Esto significa que durante poco más de un mes, los niños permanecerán en casa, y esto significa un aumento en las responsabilidades de las familias.
Este periodo de cuarentena, más que unas vacaciones o unas semanas de inactividad, debe ser aprovechado para continuar con la educación de los pequeños, de forma lúdica y adecuada a su edad. GetNinjas, la aplicación para contratación de oficios y servicios más grande de América Latina, sugiere algunas actividades que los niños pueden realizar durante la cuarentena para fortalecer su aprendizaje.
- Primero, explica la situación. No hay que ser alarmistas: al momento de explicar el porqué del aislamiento se debe hacer de forma clara y sencilla para ellos. La finalidad es orientarlos sobre cómo reaccionar ante situaciones así, y además escuchar sus preocupaciones para despejar mitos y miedos sobre la pandemia. Hay que informarlos sobre las medidas preventivas existentes, formar hábitos al respecto y recordar que se trata de una situación temporal.
- Mantén las actividades educativas. La cuarentena no debe ser destinada sólo al ocio, sino ser aprovechada para repasar y avanzar en los contenidos escolares, así como motivar su interés a través de ejercicios creativos de matemáticas, español, ciencias, historia, y medio ambiente. Puedes apoyarte de los textos de la escuela o apoyarte en recursos digitales, como el Blog de los Niños, Pipo Club o canales de YouTube. Cualquier tema extracurricular que estudien los niños deben ir acorde con su edad, para facilitar su aprendizaje.
- Incluirlos en las tareas de casa. Enseñarles a realizar tareas básicas en el hogar es una vía para inculcarles responsabilidades y hábitos de limpieza. Muéstrales que todos pueden y deben participar del mantenimiento del hogar, desde la limpieza de las áreas comunes y su cuarto, cuidar de las mascotas y plantas, lavar los platos de la comida o realizar pequeñas reparaciones del hogar, como coser un botón, clavar un clavo o cambiar un foco. Recuerda que toda actividad debe ir de acuerdo con su edad.
- Administrar el tiempo con las pantallas. No es posible prohibirles sus dispositivos electrónicos por completo, pero debe haber un balance en su uso. Si se administran bien los tiempos, son muy útiles tanto como apoyo para sus actividades escolares, como para distraerse y mantenerse en contacto con sus amigos. Monitorea que no pasen mucho tiempo frente al televisor, que pierdan el tiempo en redes o accedan a noticias alarmistas. Pueden fijar horarios para videollamadas con sus amigos, con familiares e incluso momentos para jugar videojuegos, ver sus videos musicales favoritos o a sus vloggers preferidos. La tecnología no es tu enemiga, es una herramienta más para su educación y entretenimiento.
- Establece una rutina lo más normal posible. Incluye actividades físicas que los mantengan en movimiento y liberen su energía, dale lecturas, libros didácticos, juegos de mesa, y materiales caseros con los que pueda crear. Dedica al menos una hora de tu tiempo para poner tu total atención a los pequeños, y monitorea que están cumpliendo con sus tareas diarias. Además de ser una forma de supervisión, cumplir con su rutina les creará un hábito de completar con sus deberes para poder divertirse después
- Sé paciente con ellos. Muchas madres y padres de familia pasarán este tiempo balanceando las actividades laborales con las del cuidado del hogar y sus hijos. Si bien es imposible estar al pendiente de ellos en todo momento, es necesario darles atención y tiempos para supervisar lo que hacen. Las niñas y niños más pequeños requerirán de mayores cuidados y paciencia. No desesperes: elige momentos para atenderlos y apóyate del resto de tu familia para su supervisión, siempre con paciencia hacia los más pequeños.
Que la contingencia y aislamiento social no te generen estrés. Organízate con los miembros de tu familia, planea actividades y acomoda tus horarios para que puedas cumplir con las actividades laborales y compartir tiempo con tus hijos. Que esta sea una etapa de unidad social, cuidado de la salud y fortalecimiento de los lazos afectivos.