Por: Agustín Vargas
- Columna vertebral de la construcción
- CMIC, tras obras de infraestructura
- Tren Interurbano, reasignaciones
Luego de más de dos años de haber sido relegados de las grandes obras de infraestructura del país, sobre todo las emblemáticas del presidente Andrés Manuel López Obrador (aeropuerto Felipe Angeles, Tren Maya y refinería Dos Bocas), los ingenieros civiles de México alzaron la voz para solicitar al gobierno de la autollamada 4T se tomados en cuenta para el desarrollo de esos trabajos.
No es coincidencia que los ingenieros civiles, o sea los constructores organizados de México, agrupados en la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), expresen su inconformidad ante el momento actual que vive el sector de la construcción, que tan sólo el año pasado registró un desplome de 18% y que este año se ve difícil que se pueda revertir y menos cuando ha sido desfasado de la actividad gubernamental y por ende del gasto público.
Esta es la primera ocasión, en lo que va de la presente administración que la CMIC manifiesta su inconformidad de manera pública, en una carta dirigida a la sociedad mexicana, por el hecho de las obras de infraestructura estén a cargo de las fuerzas armadas del país.
La posición crítica de los profesionales de la construcción aglutinados en la CMIC coincide con el reciente relevo en la presidencia del organismo, que ahora encabeza el ingeniero Francisco Javier Solares Alemán, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), empresario de la Ciudad de México, director de la empresa Construcción de Infraestructura SA de CV.
En su reciente toma de posesión como presidente del organismo, pidió al presidente López Obrador voltear a ver los logros alcanzados en materia de infraestructura, ya que aseveró que “la infraestructura que tenemos la hemos hecho las constructoras de México”, al tiempo que sostuvo que el mandatario federal no está teniendo relación con las distintas cámaras en el país, sino únicamente con las cúpulas empresariales.
En su comunicado a la sociedad en general, Solares Alemán expresó que los constructores organizados de México comparten la visión del secretario de Comunicaciones y Transportes (SCT), Jorge Arganis Díaz Leal, en el sentido de que los ingenieros civiles deben estar a cargo de las obras de infraestructura del país.
Reconocemos, indicó en la misiva, “el esfuerzo, profesionalismo y patriotismo de nuestras fuerzas armadas. Asimismo, somos conscientes del talento y capacidad de los ingenieros militares quienes han realizado un esfuerzo complementario en situaciones extraordinarias como son los desastres naturales; de manera similar a los médicos militares, quienes se suman a los sistemas públicos y privados en emergencias sanitarias.”
Sin embargo, enfatizó el presidente de la CMIC, “las y los ingenieros civiles, arquitectos y constructores mexicanos, formados en su gran mayoría en escuelas públicas y privadas de nuestro país, seguimos representando la columna vertebral de la industria de la construcción que genera más de 4 millones de empleos en beneficio de la economía de las regiones y del bienestar de las familias mexicanas.”
“Por ello, y considerando, tanto el desarrollo de los proyectos de construcción como el cumplimiento a la Constitución y a las leyes que de ella emanan es que reiteramos nuestra disposición para colaborar con el gobierno actual, afirmando que la construcción de la infraestructura que México necesita debe realizarse por los ingenieros civiles, arquitectos y constructores mexicanos.”
Hasta la carta abierta de la CMIC a la sociedad, en la que claramente expresa que los ingenieros civiles ya no quieren a los militares en las obras de infraestructura, ya que éstos tienen perfectamente delineadas sus tareas para salvaguardar la soberanía y seguridad del país, no para construir aeropuertos, trenes, refinerías ni caminos. Para eso está ingeniería civil.
Reasignan recursos a Tren Interurbano
A propósito de obras, hace unos días la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), que encabeza la Jorge Arganis Díaz Leal, anunció que reasignará 900 millones de pesos para dar continuidad a los trabajos en la construcción del Tren Interurbano México-Toluca.
Mediante un convenio con el Gobierno de la Ciudad de México, a cargo de Claudia Sheinbaum Pardo, se acordó que los recursos serán destinados a la construcción de vía, catenaria y sistemas de comunicación en el tramo Túnel-Observatorio, de 16.9 kilómetros. Se continuará con los trabajos en el CETRAM Observatorio y la conclusión de la obra civil para la llegada a la estación Santa Fe.
El recurso transferido sólo será dedicado a los trabajos que se especifican y no podrán traspasarse a otros conceptos de gasto, por lo cual contempla contar con un reporte mensual de avance físico de la obra y de ejercicio de recursos presupuestarios federales.
La cantidad reasignada se tiene programada en dos periodos, una de marzo de 2021 por 500 millones de pesos y otra de julio de 2021 por 400 millones de pesos para dar el total por 900 millones de pesos.