Por: José Antonio Chávez
Se acuerda del problema de desalojo que terminó con detención de un actuario en la colonia Juárez de la Cuauhtémoc, que hicieron parecer como una arbitrariedad y abuso de los propietarios, bueno el fondo es la maldita corrupción de la propia autoridad.
Los propietarios del predio ubicado en la calle de Turín 46 lograron una orden del juez del Poder Judicial de la Ciudad de México, para recuperar ese inmueble que desde hace diez años llevan invadido.
La orden de desalojo la otorgó la titular del Juzgado 15 de Primera Instancia, Leticia Medina Torrentera bajo el proceso del expediente 1372/2019 y con ello poder solicitar a la Secretaría de Seguridad Pública de Omar García Hartuch apoyo para llevar de forma legal el trámite de recuperación del inmueble.
Sin embargo, la SSP negó, mediante oficio dar el servicio de apoyo para el desalojo, lo que llevó al actuario del juzgado Rodolfo Javier Galeana ejecutar el mandamiento judicial por ley. Acusan que incluso el vox populi en los juzgados, que los mandamás de granaderos o cuerpos policiacos, se pide un moche de dos mil pesos por elemento para acudir a esos apoyos y sin el mínimo problema.
Los invasores agredieron al personal que se encargaría de ese desalojo incluyendo la detención del actuario por los granaderos que acudieron en cuestión de minutos en más de un centenar cuando se celebraba la recuperación del inmueble.
Bueno, la historia ya se conoce de los agresores que se resistieron entregar el inmueble, a pesar de tener conocimiento del ordenamiento judicial.
La queja del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México es el hecho que sus funcionarios como el actuario incluso la representación legal delos propietarios fueron golpeados, esposados, humillados y hasta amenazados por los superiores del operativo para remitidos ante el Ministerio Público por órdenes del Sector Centro.
El fondo, de acuerdo con personal del Tribunal Superior de Justicia es que quienes invaden esos predios están protegidos por la propia autoridad de la SSP, por ejemplo en voz de esas 35 familias pagan una renta a esas autoridades entre 2 y 3 mil pesos mensuales, es decir hay una aportación por esa protección entre 70 y 90 mil mensuales. Y hay unos 15 inmuebles en las mismas condiciones.
El problema es mayúsculo para la flamante alcaldesa de Cuauhtémoc, Sandra Cuevas y de rebote para la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum pues este caso tal vez esté destapando una red de protección oficial y ellas, como gobierno tal vez ni siquiera se ha dado cuenta.
Hay un auténtico desacato del ordenamiento judicial y la autoridad simplemente hizo caso omiso y en cambio argumentaron que se recurrió someterlos y presentarlos ante el MP al actuario, empleados y representantes de los propietarios porque el desalojo fue una ilegalidad.
La tarea sin duda es también para el Congreso de la CDMX, pues los diputados no pueden dejar los focos rojos de estas lagunas jurídicas en esa materia.
La pregunta es si el gobierno de Sheibnaum respetará los fallos del Poder Judicial y podrá armonizar el derecho a la propiedad, al mismo tiempo dar opciones de vivienda a esos grupos vulnerables víctimas de la corrupción de organizaciones urbano populares que lucran con su necesidad .
IMSS mas grande y fuerte por esfuerzo de sus médicos@s
Desde luego que vale la pena resaltar el espaldarazo que recibieron el personal médico en manos del director del IMSS, Zoé Robledo que aplaudió que gracias a ese esfuerzo la institución es más grande y fuerte. Y naturalmente que se ha demostrado durante la pandemia. Como reconocimiento a ese esfuerzo se develó el busto del doctor Antonio Fraga Mouret en la Plaza Médica y Médicos ilustres del Centro Médico Siglo XXI.
De paniaguados a changoleón legislativo
Pues a Gerardo Fernández Noroña no gustó nada que el panista Jorge Triana le dijera changoleón legislativo como le apodó en el debate de la Miscelánea Fiscal el diputado Jorge Espadas. Si me vuelves a decir te voy a romper la madre y el panista le reviró cobarde. Desde luego ambos de frente, Noroña es un clásico su actuar de acudir cuando baja de tribuna al lugar de quienes lo ofenden, pero en la historia legislativa no pasa de pararse de frente y bla bla bla.