Por: José Antonio Chávez
En el 2016, recién que Morena había logrado colocarse en la Cámara de Diputados como el nuevo partido del ahora Presidente López Obrador, surgió una figura para las elecciones del estado de México: la maestra Delfina Gómez.
La Cámara de Diputados estrenaba la bancada de Morena con Roció Nahle como coordinadora, su fracción era pequeña pero muy ruidosa. E incomoda al gobierno de Peña Nieto.
Delfina era una maestra que no sonaba en el plano nacional, su mayor logró alcanzar la alcaldía de Texcoco en 2012 a 2015.
Se ganó el apreció de López Obrador cuando lo acompaño, en el Estado de México en su campaña a la presidencia de México en el 2012, año que compitió contra Enrique Peña Nieto.
En ese escenario Delfina Gómez fue postulada como la candidata idónea de Morena para competir contra Alfredo del Mazo, un personaje con total respaldo de su entidad donde nació el grupo Atlacomulco.
En una charla con la maestra Delfina con varios periodistas, platicaba de sus raíces y con mucho orgullo resaltaba el oficio de su padre, una ocupación de albañil que les permitió, con esa chamba sacar a delante a su hermano y a ella. Ambos lograron concluir su carrera profesional.
Delfina Gómez Sabía que enfrentaría a un político de peso, con un respaldo de grupos económicos y políticos poderosos, sin embargo, no se achico y comenzó apretar sus recorridos por la zona oriente del estado de México.
En el PRD Jesús Zambrano apoyaba la candidatura de Juan Zepeda, un político que resurgió en su zona oriente de esa entidad. Tenía su musculo político y se identificaba con el sector de jóvenes porque tocaba en su banda de rock que lo llevo al mote del “RockStar”.
No era una elección pareja ni mucho menos que diera paso candidatos desconocidos como Delfina Gómez de un partido Morena que nadie conocía, tampoco al del PRD Juan Zepeda. Solo sonaba la panista Josefina Vázquez Mota.
La sorpresa fue que Alfredo del Mazo perdió un millón de votos al concluir los resultados de la elección, es decir alcanzó 2.2 millones cuando su antecesor, Eruviel Ávila había logrado más de tres millones de votos, una cifra similar a la que alcanzó el jefe de gobierno en la CDMX, Miguel Ángel Mancera.
Bueno, los resultados dieron la sorpresa positiva para Defina Gómez que se quedó en 1.8 millones de votos, cuando no existía ese partido. En tanto, Juan Zepeda superó, en cifras históricas para el PRD más de un millón de votos y el PAN se desfondó con a penas unos 600 mil votos.
Para el próximo año, se repetirá el mismo escenario de candidatos, es decir Delfina Gómez por Morena con sus aliados, el partido Verde y PT, mientras que, en el PRI se espera impulsen a Alejandra del Moral, delfín de Del Mazo con el respaldo de la alianza Va por México, con el PAN y PRD, en platicas con Movimiento Ciudadano que ya tiene postulado a Juan Zepeda.
Naturalmente que no será un día de campo esas elecciones para el partido oficial en el Estado de México, será, literalmente una carnicería porque se van a dar con todo. Morena quiere arrebatar la joya de la corona y el PRI necesita defender porque dependerá su sobrevivencia y fortaleza para llegar al 2024.
No es una tarea fácil que les pueda dar acuerdos a la alianza de Alejandro Moreno, Marko Cortés con Dante Delgado y Jesús Zambrano, pues de entrada tendrán que aceptar la candidatura priista y posterior trabajar para retener la corona mexiquense.
Encuestas EDOMEX opacas y viciadas
Le había comentado la inconformidad que han provocado el método de encuestas que hacen en Morena, bueno el politólogo Darío Mendoza criticó que deberían dejarlas en manos de los técnicos y no de políticos, pues esta encuesta final para Estado de México está opaca y viciada de origen. No se dan a conocer las preguntas y menos la metodología. Dirían los de enfrente, una verdadera transa para imponer al dedazo.
Esta primera encuesta para reconocimiento, no son representativas las mil 200 llamadas telefónicas para el universo de 67 aspirantes. Es lógico que esa estrategia que defiende Mario Delgado se ha convertido en un instrumento de desconfianza y lo más conveniente es tener una muestra muy sólida mediante encuestas de vivienda con grupos representativos y que la técnica sea aleatoria bien definida.
No están mancos Ebrard y Monreal
Al líder del Senado, Ricardo Monreal no le quedó otra que acelerar su propia estrategia para impulsar sus aspiraciones rumbo al 2024 y enfrentar a su propio sistema que gobierna su partido.
No lo quieren dejar pasar y por ello tiene que buscar alternativas que le permitan estar en el escenario nacional. La presentación de su proyecto de Nación, el jueves, es un buen mensaje que los empresarios vieron con buenos ojos.
No pierda de vista a Marcelo Ebrard que va por el mismo camino, pues enfrenta la misma situación, los dados están cargados de Palacio Nacional a Claudia Sheinbaum y Adán López. De ahí quiere el Presidente que salga su sucesor.
Sin embargo, dicen los que saben que no crean en Palacio Nacional que Ebrard y Monreal están mancos, tal vez den la sorpresa en el 2023 al concluir las elecciones del estado de México y en consecuencia, ambos aceleren la ruta que tomaran, obvio, fura de Morena. No descarte una alianza de ambos de hermandad.