En el primer trimestre de 2013 los proveedores de productos y servicios y empresas del sector privado no financiero soportaron el 80.6 por ciento de la operación crediticia de las pequeñas y medianas empresas, situación que contribuye a crear una creciente espiral de hasta un 20 por ciento en los precios finales al consumidor.
Sergio Ortíz Valencia, director general de la Sociedad Financiera FICREA destacó que de acuerdo a los Resultados de la Encuesta de Evaluación Coyuntural del Mercado Crediticio para el primer trimestre de este año, este tipo de financiamiento privado creció hasta en cuatro décimas con respecto a los últimos tres meses de 2012 para situarse en un 83.6 por ciento
Sin embargo de acuerdo a la muestra que realiza el Banco de México, el financiamiento bancario que se situó en un 35.8 por ciento, se redujo en igual proporción en el mismo periódo, en parte debido a la percepción de las empresas, de que las condiciones ofrecidas por la banca les eran menos favorables.
“En el caso de las pymes, la posibilidad de cercanía a una institución de credito se limita por la baja capacidad operativa de la empresa y la necesidad crediticia es sustituída por los proveedores. Ellos tienen un límite. Tienen una capacidad para apoyar a sus compradores y no pensemos que los proveedores son hijos de la caridad”, agregó.
Al abundar sobre el tema, Ortiz Valencia destacó que “el proveedor que vende un producto o materia prima, tiene que hacer negocio y si vende maquinaria, equipo o algún producto, el precio que le otorga con pronto pago a un comprador es uno y el que le otorga con un plazo para que le pague es otro”.
“El proveedor esta haciendo una inversión, corriendo un riesgo y quizás esté pagando una tasa de interés para mantener cierto nivel de inventarios en apoyo a las necesidades de sus clientes”, dijo.
Por ello resaltó la necesidad del establecimiento de programas y acciones tendientes a la inclusión financiera a aquellos usuarios del crédito que nunca lo han tenido por parte de las instituciones del sector bancario, sobre todo porque “hay muchas micro y pequeñas empresas y pequeños ahorradores e inversionistas que siguen guardando su dinero bajo el colchón”.
Uno de nuestros compromisos como institucion financiera está en ese proceso de inclusión, de integración de las pequeñas y medianas empresas a una economía más formal, a una economía de más posibilidades de desarrollo.
“Lo que hacemos es que las experiencias que hemos vivido con algunos clientes, pueden ser útiles a otros prospectos a clientes. No es que sepamos de todo, pero por nuestra actividad conocemos muchas actividades, problemáticas y soluciones exitosas que nos permiten la posibilidad de ofrecer una asesoría adecuada”, concluyó