· Miles de productores de esta cactácea y de maguey entrarán de lleno a la reconversión productiva en el país
· Posible preparar sopas estilo “Maruchan” con nopales para mejorar la nutrición
· Se busca multiplicar cultivos en Campeche, Yucatán, Quintana Roo, Chiapas, Veracruz, Puebla y Zacatecas
Por instrucciones del senador Manuel Cota Jiménez, presidente de la Confederación Nacional Campesina, alrededor de 40 mil productores de nopal y de maguey entrarán de lleno a los planes del gobierno federal que contemplan la reconversión productiva en el país, con la finalidad de lograr un mejoramiento de estos cultivos y dedicarse a la producción de alcohol y biogás a base de la primer cactácea también conocida como chumbera.
Ciro Ríos Lara, presidente de la Unión Nacional de Productores de Nopal y Maguey explicó que con ese objetivo se tiene ya un proyecto de investigación para impulsar la producción de estos dos cultivos en zonas que ofrecen potencial productivo y que reúnen las condiciones apropiadas para recuperar la cubierta vegetal y, al mismo tiempo, se constituyan en fuentes generadoras de empleos, de alimentos para las comunidades rurales y en el caso del nopal, con la perspectiva de producir biomasa, biogás y alcohol en el mediano y largo plazos.
De acuerdo con el dirigente, se ha avanzado en la concertación de un programa piloto entre productores de nopal y maguey con la Dirección General de Escuelas Tecnológicas Agropecuarias de la SEP, con el propósito de impulsar estos cultivos para la recuperación de zonas de baja productividad o que se encuentran expuestas a la erosión.
Ríos Lara dijo que se han dado los primeros pasos para iniciar el cultivo de tejidos o también denominado “in vitro”, en los mismos laboratorios de dichas escuelas, lo cual tendrá un efecto multiplicador especialmente enfocado al nopal, de manera que se propiciará una reproducción masiva de la planta en los estados de Campeche, Yucatán, Quintana Roo, Chiapas, Veracruz, Puebla y Zacatecas, donde operan las “Degetas”.
Este esquema de colaboración, afirmó, permitirá también que los estudiantes adquieran conocimientos no solamente sobre los cultivos señalados, con tecnologías avanzadas, sino que ampliarán su horizonte de capacitación sobre recuperación de tierras que han perdido su productividad en otros cultivos o que se encuentran en determinado grado erosionadas.
Durante el desarrollo del nopal, añadió el dirigente cenecista, será posible empezar a tener beneficios a través de cortes del producto tierno o “cambray”, para contribuir en la alimentación y en el ingreso familiar de la población rural donde se fomentará su cultivo comercial. Esto podrá hacerse al envasar en salmuera o vinagre, para su comercialización. Es posible también preparar sopas estilo “maruchan”, pero con nopal, y una gran variedad de dulces.
“Contamos, indicó, con los estudios sobre las variedades de nopal que se requerirán para cada uno de los proyectos. Por ejemplo, el nopal que se utilizará para producir biogás y otra variedad para producir alcohol. En biogás, es la variedad “Goliat”, que es una raqueta que alcanza un peso de 10 kilogramos, y contiene mucha biomasa”.
Dadas las dificultades para transportar las raquetas de nopal, por su gran peso, se necesita crear las condiciones para su reproducción “in vitro”. Esto sería de gran beneficio para los estudiantes, por la reducción de costos. Se han identificado algunos laboratorios que fueron abandonados y están deteriorados, por lo que es posible rehabilitarlos y acondicionarlos para su operación y destinarlos a la reproducción del nopal.
Informó que se ha localizado una de las escuelas en Cintalapa, Chiapas, que cuenta con una superficie de 120 hectáreas. En cada hectárea se podrían cultivar entre 30 mil y 40 mil plantas. La región cuenta con clima cálido-tropical, apropiado para el desarrollo de la variedad “Goliat”, la cual se ha adaptado en condiciones favorables, con la ventaja de que allí no caen heladas.
Aclaró que se tiene la impresión de que el nopal es uno de los cultivos que se adaptan en cualquier lugar, sea del trópico o del desierto; soporta temperaturas muy bajas y también altas, sobre los 30 y 35 grados centígrados. Sin embargo, en las áreas del trópico húmedo, las raquetas alcanzan rápidamente un grosor extraordinario, y su tiempo de maduración es más corto que en zonas desérticas; en éstas, su tiempo de aprovechamiento es más largo.
Respecto del maguey, también se cuenta en el país con zonas de alto potencial productivo. En realidad se dio en épocas pasadas. Para nadie es un secreto que el pulque y aguamiel fueron bebidas preferidas por una gran parte de mexicanos, tanto del medio rural como de zonas urbanas. Desgraciadamente por los cambios en los hábitos y costumbres y la gran capacidad de penetración de bebidas azucaradas no naturales, provocadoras definitivamente de problemas de obesidad y exceso de peso, ayudaron a que el pulque y aguamiel desaparecieran de la dieta de nuestra población.
El maguey, igual que el nopal, donde quiera que se siembren se desarrollan. Lo que se debe buscar, concluyó, son las mejores zonas de producción. Los estados de México, Hidalgo, Tlaxcala, Puebla, San Luis Potosí y muchos otros tienen la aptitud para el cultivo de estas plantas que, además de detener la erosión del agua y el viento, proporcionan alimentos y materias primas adicionales para la población rural.