Por José Antonio Chávez
El ex líder del PRI, Manlio Fabio Beltrones está firme en impulsar una iniciativa que se convierta en ley anti-chapulines y con ello se elimine, pero en todos los partidos el paso automático de los salientes como plurinominales al o viceversa, Senado –Cámara de Diputados-Congresos locales.
En una charla con el político sonorense, dejó muy en claro la necesidad de adecuar la política a los tiempos modernos y, desde luego las exigencias de la gente.
Tal vez por ello Beltrones sin pensarla soltó la necesidad de los gobiernos de coalición que, para su información logró insertar en los estatutos del partido.
El contenido coadyuvó unanimidad en la mesa de Visión de Futuro que el también ex gobernador de Sonora impulsó en Guadalajara, y que se suma a las propuestas de la Mesa de Campeche de quitar candados de militancia por diez años y se abre la oportunidad de participar a los simpatizantes no solo a la Presidencia de la República, sino gobernadores, presidentes municipales, alcaldías, regidores, y legisladores.
Anote que las mesas de trabajo, levantó expectativas de focos rojos por la inconformidad del grupo rebelde de Ivonne Ortega y Ramón Martel.
Bueno, podemos advertir que la operación del senador y líder de la CNOP, Arturo Zamora fue elemental para lograr consensos y evitar la confrontación. El tejer fino, lo ubica como un activo importante para el partido y lo ubica hoy como el candidato natural para la gubernatura en Jalisco.
Sume a Emilio Gamboa y César Camacho, como mandamás del Congreso que también cada quien hizo lo propio para apaciguar las aguas, sobre todo en Campeche donde se dieron los estatutos.
Ahora Enrique Ochoa tiene la tarea de armar el proceso para las candidaturas al 2018, un evento que será la prueba de fuego para saber la fuerza con que enfrentaran las elecciones, pues si no hay consenso para el que designen, el PRI se puede tambalear.
Le comentamos que la designación del candidato de Morena para la CDMX y suceder a Miguel Angel Mancera no se cristalizaría por consenso y, en cambio se realizará por encuestas.
Bueno, en el primer round del sábado, Martí Batres se desplomó del número de Consejeros que lo apoyaban, pues paso de 136 a 84, mientras que Claudia Sheinbaum, la consentida del dueño del partido, Andrés Manuel López Obrador, con toda la cargada apenas logró 76, es decir 12 más que Ricardo Monreal que creció de 11 que lo apoyaban en 2015, a 64. Si no hay mano negra o dedo de AMLO las encuestas, sin duda pueden favorecer al de Cuauhtémoc.