Acapulco, Mayo 20.- El sistema bancario mexicano reitera que está preparado para adoptar las nuevas reglas de capitalización de Basilea III.
Uno de los temas que se resaltó en la 75 Convención Bancaria que concluyó este fin de semana es que contrariamente a lo que ocurrió en otras crisis los bancos comerciales no tienen problemas de capital, aunque se reconoce que adoptar reglas más severas podría pegar en el otorgamiento de más crédito.
Empero, habrá que decir que decir que el ecosistema de bancos es un paisaje variopinto donde existen entidades con más de 40 por ciento de capital y otras que rozan el mínimo requerido.
También existen bancos menos propensos a realizar operaciones de derivados y otros instrumentos y otros que estarían más expuestos a vaivenes de tasas y tipos de interés.
Como sea, la posición de la Asociación de Bancos de México (ABM) que preside Jaime Ruiz Sacristán es que se podrán alcanzar consensos para tener una postura de gremio ante la secretaría de Hacienda, de José Antonio Meade, el Banco de México de Agustín Carstens y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) al mando de Guillermo Babatz que a la fecha no han fijado un mapa de ruta para la adopción de Basilea III.
La solvencia de la banca mexicana medida por su índice de capital básico al cierre del primer trimestre es de 15.7 por ciento promedio cuando el mínimo requerido es de 8 por ciento y la nueva regulación en puerta refiere a un nivel de 10.5 por ciento que sin generar un cisma ha traído ciertas divisiones entre las entidades.
La postura de las autoridades financieras ni de lejos es preocupación sobre la salud de los bancos, al grado que la rápida adopción de Basilea III no parece relevante.
Empero, se reconoce que en un ambiente de incertidumbre como el actual con la incertidumbre sobre el futuro del sistema euro ha traído la percepción que países como México tendrán más dificultades para acceder a fuentes de financiamiento del exterior, lo que hará que dependan más de la banca mexicana.
Es por ello que la rapidez para apegarse a las reglas de Basilea III podría estar en función de la profundidad de la crisis de deuda europea y sus eventuales consecuencias en la recuperación de la economía global.
Para muchos expertos Basilea III podría limitar el crecimiento en la cartera crediticia de los bancos dados los requerimientos de más capital, lo que pagaría en la capacidad de apalancar una entidad para colocar el crédito.
Y es que la crisis de la Unión Europea con el sobreendeudamiento de varios países preocupa a algunos banqueros como Guillermo Ortiz, presidente de Banorte quien pronostico que una salida de Grecia del sistema euro traería consecuencias para los mercados mucho más severas que la quiebra de Lehman Brothers en 2008.
Ortiz es uno de los pocos que llama la atención ante ese evento, pues la gran mayoría de los banqueros han dicho que la salida de Grecia del euro no afectará mayormente por la relación que se tiene con la economía de Estados Unidos, la ausencia de déficits fiscales y la buena capitalización de los bancos.
Para la banca 2012 se ve como un año de mayor colocación de crédito, pero un escenario de caos en la zona euro ocasionará que muchos bancos actúen con mesura y prudencia a la hora de prestar.
JVM convence a banqueros
La presentación de los presidenciables en el foro más importante del sistema financiero generó toda serie de comentarios entre los banqueros, aunque las palmas fueron para la abandera del PAN, Josefina Vázquez Mota, quien fue interrumpida durante su presentación con sonoros aplausos en seis ocasiones e incluso al final motivó que el auditorio se pusiera de pie. Los otros tres candidatos Gabriel Quadri de la Torre, Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador pudieron corroborar que la aduana de los banqueros no es fácil e incluso fueron tacaños en el momento de aplaudir. Como sea, Vázquez Mota con un discurso bien articulado fue la vencedora de la encerrona con los hombres del dinero.