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La presión ciudadana vs dinero de los partidos

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Para este lunes el presidente de la Cámara de Diputados, el priista Jorge Carlos Ramírez Marín convocó a reunión a los coordinadores de las fracciones parlamentarias. Anoche hizo lo propio el Senado de la República que preside el panista, Ernesto Cordero.

La idea es tratar el tema del sismo y sus afectaciones, es decir de cómo la Cámara de Diputados podrá hacer frente para presupuestar recursos suficientes que ayuden a la reconstrucción de miles de viviendas, infraestructura y más.

No es un tema ligero si tomamos en cuenta que hay presiones severas del Frente Ciudadano que integran el PAN de Ricardo Anaya, el PRD de Alejandra Barrales y Movimiento Ciudadano de Dante Delgado.

Ellos, como frente propusieron destinar todos los dineros que les dan a los partidos políticos, ya sea como gasto ordinario anual, o para campañas políticas. Que la contingencia del sismo que dejó severos daños ordena la urgencia de mandar recursos para coadyuvar en las tareas de reconstrucción.

Como dato los partidos políticos recibirán 6 mil 700 millones de pesos para las campañas del 2018, otra suma millonaria para los gastos de partido al año, entonces es un dineral que hoy puede ser factor importante para mitigar los daños.

El líder de los priistas, Enrique Ochoa abrió la cartera para destinar, ya 258 millones de pesos que forma parte de una partida ordinaria que les otorgan el INE anualmente. Es dinero que puede ayudar de manera inmediata pero no suficiente y menos resuelve el problema.

Por eso, Ochoa el fin de semana cruzo información con los líderes del Congreso, César Camacho en San Lázaro y Emilio Gamboa en el Senado. Quieren afinar la forma de poder otorgar esos dineros que les entregan como partido y desde luego afianzar un presupuesto que pueda sacar adelante el próximo año esos gastos de desastres naturales.

Marko Cortés y Fernando Herrera de las bancadas del PAN, ayer presionaron que se debe concluir con un presupuesto que pueda solventar los daños de todos los mexicanos.

Que el Congreso debe garantizar esos recursos y para ello quieren llevar a una reingeniería financiera presupuestal, amén de destinar al 100 por ciento el dinero que se les da a los partidos políticos y reducir, obviamente los gastos groseros de publicidad – principalmente 80 por ciento a las dos televisoras más importantes- por nueve mil millones de pesos que hace el gobierno federal.

Sin embargo, renunciar al presupuesto que les marcó el INE de Lorenzo Córdova, no es sencillo porque los partidos políticos utilizan ese dinero para la promoción del voto, la compra de conciencias y dan como dadivas para allegarse simpatizantes. Y no solo los del PRI, hablamos hasta de Morena, partido propiedad del pulcro Andrés Manuel López Obrador.

Todos los partidos viven de eso, de ese presupuesto que pagan sueldos a sus líderes y a sus militantes con cargos. Renta de sus edificios o hasta la compra de los mismos, vehículos, viáticos y sus viajes, buenas comidas y bebidas, amén de buena vida en sus giras, nacional e internacional.
López Obrador, para que de una idea dice que gana 50 mil pesos mensuales y es dinero que le paga su partido; en el PAN, Ricardo Anaya unos 60 mil pesos, mientras que en el PRI Ochoa gana unos 100 mil pesos.

Eso sin contar las millonarias cifras que destinan sin comprobar gastos y que muchas van para los bolsillos.
Entonces renunciar a esos recursos no es cosa ligera, sin embargo será el foco de atención en los próximos días, eso si no por voluntad propia, sino por la presión ciudadana que manifestó estar hasta la madre de ellos. Más de cinco millones de firmas avalan esa renuncia, entonces no les queda otra que atender al pueblo, pues no hacerlo estarán marcando un fracaso electoral anticipado.

 

Mexico sigue de pie y comunicado. A pesar de los desastres naturales que han azotado a nuestro país en los últimos días, la red de carreteras federales, el transporte y las telecomunicaciones mantienen conectado a más de 120 millones de mexicanos.

El Gobierno Federal, a través de la SCT, ha demostrado que la política pública de Comunicaciones y Transportes es mucho más fuerte que huracanes o sismos y que la infraestructura nacional resistió el embate de la naturaleza y mantiene comunicados y unidos a todos los connacionales.

Los 40 mil kilómetros de carreteras, los 10 mil de autopistas, los puertos y aeropuertos operan con normalidad, incluso el criticado Paso Exprés de Cuernavaca permite el tránsito confiable de usuarios cotidianos, el traslado de víveres, maquinaria pesada, voluntarios y rescatistas sin problema. Una buena es también que ofreció el paso gratuito de peaje.

 

El gobernador de Querétaro, Francisco “Pancho” Domínguez decidió cancelar su informe de gobierno el próximo domingo, en solidaridad con nuestros hermanos de la CDMX, Morelos, Puebla, Oaxaca, Chiapas, Edomex y más. Hoy, instruyó a apoyar a los hermanos en desgracia con todos los recursos que estén al alcance de su gobierno, tanto material, humano como económico.