Por Rogelio Varela
La migración de la industria automotriz hacia vehículos eléctricos generará una demanda exponencial de litio, lo que ha despertado en la 4T la intención de una injerencia del gobierno en su explotación
Por lo pronto, el sector empresarial está atento a las señales que envía el titular de la Semarnat, Víctor Toledo Manzur, luego que recientemente se pronunció a favor de que se nacionalicen los proyectos de extracción litio, considerado como el “nuevo petróleo”, porque el metal sirve para almacenar energía en baterías de larga duración que estarían demandando las armadoras de autos.
En el Webinar “Pos Covid, Pos Neoliberalismo, La Pandemia y el Futuro de América Latina”, organizado por la UNAM, la semana pasada, el funcionario indicó que el estado debe controlar las reservas de litio, mediante la creación de una empresa pública, que puede tener participación privada, para no dejar que las empresas chinas e inglesas estén en ese mercado.
Ya opera el proyecto Sonora Litio, ubicado en esa entidad y está representado por una coinversión entre la canadiense Bacanora Minerals, con 77.5 por ciento y la china Ganfeng Lithium, con 22.5 por ciento, a explotar en un espacio de 19 años.
Bacanora Minerals es la que está desarrollando el proyecto, ubicado a 180 kilómetros al noreste de Hermosillo, dentro del municipio de Bacadéhuachi, en donde se espera producir 17 mil 500 toneladas de carbonato de litio en 2020 y luego aumentar dicha producción a 35 mil toneladas al año.
Las expectativas señalan que en Sonora se ubica el yacimiento de litio más grande del planeta. Esa mina en particular fue concesionada en 2015 a la empresa de inversión privada multinacional. De acuerdo al portal especializado de Mining Technology, el potencial de reservas probadas y probables es de 243.8 millones de toneladas.
El Gobierno de México se ha reservado cuatro de once yacimientos en el país, para que el Servicio Geológico Mexicano se dedique a hacer muestreos para determinar su potencial, lo cual no limita la participación de la iniciativa privada.
Originalmente, el Gobierno pretende encontrar socios privados para la explotación de las áreas que se reservará, que están en Jalisco, Puebla y dos en Sonora y, para ello, tiene reuniones con inversionistas de Alemania, Canadá, Estados Unidos, Japón y Reino Unido.
Los siete proyectos ya concesionados al sector privado están en San Luis Potosí, Zacatecas, Baja California y Sonora, y todo indica que el tema trascenderá nuestra frontera, ya que el gobierno de Estados Unidos también esta interesado en la explotación del litio.
La ruta del dinero
Ricardo Benjamín Salinas Pliego regresó a las redes sociales para animar la reapertura que comienza a tener la economía mexicana. Para el presidente de Grupo Salinas la templanza será fundamental para superar la adversidad y reiteró que en esta coyuntura será clave defender a las empresas que son las principales generadoras de empleo, riqueza y prosperidad. También manifestó que quienes mejor se adapten al cambio serán los primeros en salir delante de un momento muy complicado para el país, y por supuesto para la economía.