Por: José Antonio Chávez
Para el coordinador de los senadores, Julén Rementería el PAN está a favor que se le meta mano a la reforma electoral pero después de la elección presidencial del 2024.
Que hoy no hay ni tiempo ni las condiciones para hacer una nueva ley que, sin duda se podría ejecutar pero después del 2024.
El panista señaló que el INE enfrentará el 2023 una importante elección de los estados de México y de Coahuila y no se puede descuidar.
Y después viene la presidencial del 2024, por eso, dijo Rementería que es importante esperar los tiempos para buscar enriquecer el árbitro electoral.
Desde luego que el mensaje del panista es que ellos, como opositores no están en desacuerdo que se le meta mano pero en común acuerdo con todas las fracciones y con los tiempos suficientes para discutir y aportar lo que se tenga que aportar.
Pero que esa reforma del Presidente simplemente no es la que México necesita y que solo ellos, los opositores, tienen el voto para votarla, vaya, salir a defenderla para rechazarla. Que la decisión está en sus manos.
El mandamás de los senadores está convencido que los priistas en la Cámara de Diputados están firmes con la oposición, su líder nacional, Alejandro Moreno “Alito” ha refrendado que no acompañará a Morena.
Las pláticas con su par en San Lázaro, Jorge Romero es que el PRI de Rubén Moreira está más que firme con la alianza. Obviamente Movimiento Ciudadano de Jorge Alvarez Maynéz y el PRD de Luis Espinoza Cházaro. Son los votos opositores que garantizan el rechazo de esa reforma presidencial.
La insistencia del senador es que el INE es un autónomo que determina las elecciones en su calidad de árbitro electoral, un sistema que ha logrado que en el país se tenga confianza en ese instituto.
Cambiar a la que quiere el Presidente es como derrocar la democracia y abrir espacios al autoritarismo presidencial para que sean, los Consejeros, disfrazados de electos por el ciudadano, los que decidan a quien ganó las elecciones.
Dicen los que saben que esa estrategia que quiere el Presidente de desaparecer el INE y dar paso a que sean los ciudadanos los que decidan, por voto los nuevos Consejeros, lleva el efecto direccionado de centralizar las decisiones y tomar el control de las elecciones desde Palacio Nacional.
Por eso el coordinador de los panistas en la Cámara Alta insiste que si se dobla la oposición, el INE pierde.
Miguel Ángel Mancera y Movimiento Ciudadano de Dante Delgado para dar el voto en contra, en consecuencia, aunque en San Lázaro logre pasar, el voto de los priistas está garantizado que será de rechazo.
Por lo pronto, ayer el líder del PRI, Alejandro Moreno refrendó que su bancada en el Congreso de la Unión no aprobará nada que le haga daño al Instituto Nacional Electoral, es decir cero votos a la reforma presidencial.
Rodean las catrinas a Monreal; “no tengo miedo ni al miedo”
Ricardo Monreal se rodeó de las catrinas que deambulaban en la explanada del Senado de la República.
Primero, fue una catrina de Veracruz, y Monreal aprovechó para no dejar sentida a ninguna de las que visitaron el Senado: “tráiganse a las otras” para de una vez tomarse la gráfica.
Ahí posó para la foto del recuerdo y de paso se aventó su “palomazo” cuando se acercó la nieta de Julio Jaramillo, Fabiola Jaramillo vestida de catrina.
Que no le tiene miedo ni al miedo ni a la muerte y que está muy cerca de su muerte política. Pero que al final del día, sostenía sonriente que estaba muy bien acompañado, de las catrinas.
No hay duda la vagancia política de Monreal que no cede espacios a la “corcholata” oficial, Claudia Sheinbaum, obviamente en un pleito a navaja limpia como aquel 2018 cuando se disputaban la candidatura a la Jefatura del gobierno de la Ciudad de México.
Acusa que es la artificie de esta guerra sucia, la misma que llevó ahora abrir fuego amigo con la gobernadora de Campeche, Layda Sansores con sus audios de espionaje.
Como dato adelantó que está preparado para enfrentar a doña Layda y sus alrededores, aunque sean del Ayuntamiento del Palacio, frente al Zócalo.