– Negociaciones salariales (noviembre): 4.2%; Banorte-Ixe: 4.2%; anterior: 4%
– Las negociaciones salariales en noviembre se ubicaron por debajo del 4.6% observado en el mismo mes del año anterior
– En nuestra opinión, el resultado de las negociaciones salariales no constituye motivo alguno en términos de inflación
Las negociaciones salariales en noviembre resultaron en incrementos de 4.2% en términos nominales (Banorte-Ixe: 4%). La cifra de noviembre se explica por un incremento del 4.2% en los salarios del sector privado aunado a un aumento de 3.8% en los del sector público. Cabe destacar que la mayoría de las negociaciones se condujeron en el sector privado (98% de las 438 negociaciones que tuvieron lugar), incluyendo también a la mayoría de los trabajadores (45 mil de los 50 mil trabajadores que negociaron salario en noviembre), a diferencia del mes anterior en donde la mayoría de los trabajadores pertenecían al sector público, como se muestra en la tabla siguiente.
Nuevamente, las negociaciones en el sector industrial resultaron por arriba del promedio observado en lo que va del año (4.6% vs. 4.4%).El sector de electricidad, gas y agua obtuvo el mayor incremento con respecto al mes anterior (+4.6% vs +2.1%), cifra también por arriba del promedio de 3.9% en lo que va del año. Asimismo, en el sector minería los salarios aumentaron 5.9%, por arriba del promedio de 4.2% observado en lo que va del año.
No obstante, en el sector construcción las negociaciones resultaron en un incremento de 4.4%, básicamente en línea con el promedio del año. Finalmente, el sector manufacturero pactó incrementos de 4.4% en noviembre, ligeramente por debajo del promedio de 4.6% observado en lo que va del año.
Mientras tanto, las negociaciones en el sector servicios resultaron en incrementos menores al promedio del año. Destaca el incremento en los salarios del sector de transportes (+3.3%), lo que compensó por los incrementos en los sectores de comercio y servicios financieros, arriba 4.7%, respectivamente. No obstante, los salarios en el sector “otros servicios”, aumentaron 4%, cifra mayor a la observada en el mes anterior, como se muestra en la siguiente tabla.
En nuestra opinión, el resultado de las negociaciones salariales de noviembre no constituye un motivo de preocupación en términos de inflación. Seguimos pensando que los aumentos en los salarios contractuales en los últimos 11 meses responden sobre todo a un período de recuperación de la pérdida de productividad durante la crisis económica, y no implican que las empresas perciban mayores presiones inflacionarias en los próximos 12 meses. En este sentido, los salarios reales en México han mostrado un retraso significativo con respecto al ritmo de crecimiento del empleo. Adicionalmente, otras medidas de remuneración en la economía se mantienen estables.