Llegan las vacaciones de Semana Santa, que vienen de la mano de unos días de descanso escolar para los pequeños, y con tiempo libre para destinar al ocio y la diversión. ¿Y por qué no también a mantener el aprendizaje de una forma entretenida?
No hay que olvidar que durante los primeros años de vida es cuando se generan más conexiones neuronales y también es cuando una persona es capaz de absorber más información. Pero, al mismo tiempo, esta es una etapa en la que el aprendizaje de nuevos idiomas, si no se practican con frecuencia se pueden perder. El cerebro es un órgano que necesita entrenamiento diario al igual que los músculos del cuerpo, por ello, ejercitarlo también en vacaciones, nos ayudará a mantenerlo en forma durante todo el año.
Las vacaciones de Semana Santa son cortas, pero ofrecen a niños y niñas una gran cantidad de horas libres que se pueden aprovechar para practicar inglés. No hablamos de tarea extra ni de clases particulares, sino de usar la diversión, unida a la tecnología, y todas las facilidades que ésta nos aporta, para incorporar en su día a día el aprendizaje de la lengua inglesa, mediante actividades o recursos que sean efectivos mientras el pequeño se entretiene.
Desde Lingokids, como expertos en educación y enseñanza de inglés a niños de entre 2 y 8 años de edad, queremos hacer unas pequeñas recomendaciones a las familias, y que servirán para que los niños puedan seguir practicando y aprendiendo inglés durante las vacaciones, y de forma divertida:
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Cambie el idioma de los dispositivos tecnológicos al inglés: piensa en todo el tiempo que los niños dedican a la tecnología (tablets, videoconsolas, reproductores…). La generación Z tiene la capacidad de usar los terminales de una forma muy intuitiva, pero el cambio de idioma es un buen recurso para que visualicen palabras y frases en el nuevo idioma.
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Haga uso de las aplicaciones creadas para que los pequeños lleguen a adultos dominando el inglés. La tecnología ofrece mucha oportunidades. De hecho, una investigación realizada por Lingokids, pudo comprobar quelos niños tienen mejores experiencias de aprendizaje y retienen el doble de vocabulario con el uso de ‘apps’ frente a los métodos de aprendizaje más tradicionales como audios o tarjetas con palabras.
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Hablar a los hijos en inglés, aunque dé pena. Es normal que muchos adultos no se desenvuelvan a la perfección en inglés, y es conocido que los mexicanos son penosos a la hora de hablar este idioma. Pero que esto no sea un impedimento y no volquemos estos miedos en nuestros hijos. ¿Por qué no comenzar con frases sencillas del día a día o con palabras sencillas para normalizar el uso de inglés en el día a día? Las aplicaciones que usan los hijos, ya mencionadas, también pueden servir a los padres y madres para escuchar inglés y conocer más del idioma.
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Escuchar música y ver películas o series en inglés. Este es un recurso que realmente funciona. Se recomienda en un principio el visionado de sus películas favoritas, ya que conocen la historia y para ellos será más fácil la comprensión.
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Juega en inglés. Los niños y las niñas quieren y necesitan jugar. Tanto en aplicaciones como en el mundo offline. Algunos de los días se puede desarrollar un plan diferente como jugar a algún juego de mesa o alguno tradicional, pero usando palabras en inglés.
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Practica con nativos. No siempre es fácil encontrar personas extranjeras viviendo en tu entorno con las que poder hablar este idioma, pero siempre se puede hacer uso de las oportunidades de la tecnología, como la aplicación Lingokids, en la que ofrecen clases particulares con profesores reales nativos a través de video conferencia.