En línea con nuestra expectativa y la del consenso, Banxico decidió aumentar en 25pb la tasa de política monetaria a 3.25% por primera vez desde agosto de 2008.En este sentido, la anticipada coordinación de facto con la Fed ? dado que el instituto central de EUA ya empezó con su proceso de normalización ? ha comenzado. De hecho, la Junta de Gobierno subrayó que, como consecuencia de la decisión de la Fed, en ausencia del citado ajuste a la tasa de política, se podría generar una depreciación adicional desordenada en nuestra moneda que pudiera repercutir sobre las expectativas inflacionarias y la inflación misma.
El banco central reconoció una mejoría en su balance de riesgos sobre la actividad económica, al tiempo que destacó también una mejoría en el corto plazo del balance de riesgos para la inflación.El efecto neto de la valoración de ambos balances de riesgo por parte de Banxico bajo nuestra perspectiva, da como resultado que el banco central cuenta con suficiente flexibilidad para la implementación de la política monetaria en 2016. Por lo tanto, seguimos previendo como plan de vuelo de Banxico la coordinación de facto con la Fed. Adicionalmente, creemos que el banco central cuenta con el espacio para tomar medidas adicionales en el momento en que las condiciones lo requieran. Por último, pero no menos importante, subrayamos que Banxico continúa puntualizando sobre la importancia de la consolidación fiscal como medida fundamental para mantener un marco macroeconómico sólido en nuestro país. Coincidimos con lo anterior, pues consideramos que será crucial como herramienta para diferenciar a nuestra economía del bloque emergente bajo un contexto más retador en términos de actividad económica.
En este sentido, reiteramos nuestro pronóstico de un ritmo muy gradual de incrementos a la tasa de política por parte de Banxico, en línea con la previsión de nuestros colegas en EUA sobre las futuras decisiones de la Fed y anticipamos que la tasa de política monetaria de México cierre en 3.75% en 2016.