Por: José Antonio Chávez
La secretaria de Seguridad Pública Federal, Rosa Icela Rodríguez ayer se placeó en el INE en la presentación de los nuevos consejeros y la flamante presidenta, Guadalupe Taddei Zavala.
Es una aspirante de las más fuertes para suceder a la actual jefa de gobierno de la ciudad de México, Claudia Sheinbaum.
Su presencia permanente en las mañaneras, sin duda que es un claro espaldarazo del Presidente López Obrador.
Con la sonrisa marcada detonaba su buen humor para codearse con los gobernadores del Estado de México, Alfredo del Mazo y de Coahuila, Miguel Riquelme, aunque ellos sean priistas.
Que decir de César Yáñez, el mismo brazo derecho de López Obrador y que hoy pareciera tener la responsabilidad de acompañar, en la estrategia electoral, al secretario de Gobernación, Adán López y la misma Rosa Icela, es decir la Presidencial y la CDMX, vaya, el uno dos.
No la pierda de vista porque sin duda ya la soltaron y ahora la verán hasta en la sopa, es un trecho corto para moverse en esta gran ciudad capital en busca de posicionarse y buscar la candidatura natural en el 2024.
Enfrente, en su propio partido están otros tiradores, anote al mismo secretario de Seguridad Pública del gobierno de Sheinbaum, Omar García Harfush con una buena aceptación.
También suena y la quiere la secretaria de Bienestar, Ariadna Montiel, una mujer política con gran capital político y que las artimañas de los ex delegados de Coyoacán, no la dejaron llegar en el 2018 a pesar de ser la más aceptada en las encuestas.
Si bien Rosa Icela sabe que para lograr la candidatura no será nada fácil, también sabe que hoy su partido Morena y sus aliados, enfrentan una adversidad porque la oposición les ganó 9 de las 16 alcaldías, un severo descalabro a Sheinbaum.
La Ciudad de México estará tan peleada como la Presidencia de México, no hay nada para nadie y no hay día d campo en las elecciones venideras del 2024.
Tal vez por ello el Presidente le dio luz verde para que busque emparejar los cartones con los opositores que hoy las cifras les dan una ventaja.
Se enfrentarán a la alianza que encabezará en esa capital el PAN con el PRI y PRD, como aspirantes suena una gran lista, pero los más posicionados son el alcalde de Benito Juárez, Santiago Taboada y las senadoras, Xóchitl Gálvez y Kenia López.
La alcaldesa de Cuauhtémoc y también panista, Sandra Cuevas es otra política con aceptación para dar la pelea por la candidatura, su confrontación con Sheinbaum la subió en el Top Five de aspirantes, aunque su postura es dejar la política al concluir su cargo para dedicarse a sus empresas.
Rosa Icela también está consciente que enfrente, al interior de su partido Ricardo Monreal, líder del Senado, tiene un alto porcentaje de lograr la candidatura. Si bien forma parte del cuarteto de corcholatas con Sheinbaum, Adán López y Marcelo Ebrard, rumbo a la Presidencia, hay una enorme posibilidad que se incline, al final del del día por la CDMX.
En síntesis, lo qué si tienen, todos muy claro, es que Morena no tendrá un día de campo en esta gran ciudad.
También Puebla en disputa
En otro pleito por alcanzar la candidatura de Morena, es en el estado de Puebla entre el presidente del Senado, Alejandro Armenta y el mandamás de los diputados en San Lázaro. Ignacio Mier.
Ambos están abiertamente realizando campañas para su posicionamiento rumbo al 2024, son primos, pero en la lucha por el poder no hay parentesco, es decir, en el lodazal hasta mentadas de madre hay.
Los dos tienen escenarios importantes, Ignacio Mier es protagonista como coordinador de su bancada y mandamás de la Cámara baja. Tiene a su disposición todos los espacios para ofrecer declaraciones que le den posicionamiento mediático.
Lo mismo pasa con Armenta, pues incluso su vitrina es más amplia por ser el presidente de la Mesa Directiva del Senado con la ventaja de conducir las sesiones con total cobertura del canal del Congreso y al mismo tiempo de invitar a la Cámara Alta, y promover, a personajes de su natal Puebla. Todos, obvio, son votos, incluso grupos de estudiantes.